¡ARRIBA LAS MANOS!

Las palabras, recaditos y puyas proferidas contra el FC Barcelona por “El especial zanguán” desde el banquillo del Madrid, ya empiezan a hacer efecto en el estamento arbitral, así tenemos que a sus ladridos de si hay un equipo que juega muchas veces contra diez, respondieron los colegiados de turno, con una parcial interpretación de la sanción de tocar el balón con las manos y con la expulsión de un jugador blaugrana. La obsesión de Mourinho con el Barça raya en lo enfermizo, secuelas que le dejó el saber que nunca podrá entrenar al equipo de su vida y al de su hijo.

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Así tenemos dos varas de medir, con las manos de Piqué y con las de Xabi Alonso, en el caso del jugador azulgrana es más difícil de apreciar, porque cae al suelo y da el balón con la diestra, pero en la del mediocampista vasco la falta es evidente, brazo extendido hasta arriba y manaza con claridad meridiana. La disparidad de criterios acongoja al más pintado.

Aquí todo queda a criterio del árbitro, pues si el balón da en la mano es involuntaria y no se pita, pero si la mano va a por la pelota es sancionable. Pero la duda que se plantea es si Piqué tuvo intención de jugar el balón con la mano, como así lo afirma Ayza Gámez en el acta arbitral, ¡en dos ocasiones! La primera le sacó amarilla y la segunda volvió a reincidir. Tengo mis dudas, aunque con la torrija que tenía Gerard el domingo, es más que factible.

Ahora bien, lo que no genera ningún tipo de duda, es la mano flagrante de Xabi Alonso, la cual no quiso ver el trencilla de turno, en este caso, Mateu Lahoz, porque estaba en el área, en el área del Bernabéu. Fue un “arriba las manos” en toda regla, y dejemos ahí la ambigüedad de la frase. Lo que no dejamos de denunciar es este doble rasero a la hora de pitar, y el otro doble rasero, el de la caterva cibelesca y el del relañato, que ahora callan, miran para otro lado y no dicen ni pío sobre el presunto “villarato” merengue.