viernes, 30 de abril de 2021

El Barça se autoflagela contra el Granada

 

Batacazo monumental, pifia de dimensiones colosales,… ¡cagada descomunal! Cualquier titular se quedaría corto para el fallo garrafal del FC Barcelona. Doble error, para más inri, puesto que dejó escapar el liderato de LaLiga y por otro lado perdió la oportunidad de depender de sí mismo. Y es que la inesperada derrota ante el Granada por 1-2 en el Camp Nou deja al Barça al borde del abismo. Sin posibilidad de error. Ha pasado de ser el favorito, era líder en el descanso cuando ganaba 1-0, a ser el que peor lo tiene para el título. A día de hoy Atlético, Madrid y Sevilla lo tienen mejor. El Atleti es líder, el Madrid tiene el goal average ganado al Barça, y el Sevilla está en racha. Lo dicho, es firme candidato a quedar cuarto. Ha pasado del todo a la nada en 45 minutos desastrosos.




La primera parte contra los granadinos tampoco fue para tirar cohetes, se vio al Barça cansino y remolón de los últimos partidos en el Estadi. Pero al menos dejó algunos detalles de calidad, metió un gol magnífico y contuvo a un rival que no se acercó con peligro a las inmediaciones de Ter Stegen. Koeman dispuso su once tipo, con la inclusión de Ilaix Moriba por Pedri y de Umtiti por Lenglet. Sin exhibir un gran fútbol los locales se adelantaron en el electrónico con gol de Messi, tras asistencia brillante de Griezmann. El propio Leo tuvo la sentencia, pero su tiro cruzado lo salvó el portero con la pierna. Con ese incierto marcador se llegó al descanso.

Tras la reanudación los de Diego Martínez avanzaron líneas, a pesar de las bajas buscaban puntuar en el campo del Barcelona por primera vez en su historia. Y vaya si lo consiguieron. Pillaron a los azulgranas descolocados en una contra, Mingueza despejó mal y Machís se quedó solo ante el portero, batiéndolo de potente disparo al primer palo. El desconcierto absoluto se instauró en el Barça. El propio Koeman vio la roja por protestar. Otro error en la zaga culé propició la gran debacle, un centro desde la banda izquierda sirvió para que Jorge Molina anotase el segundo de perfecto cabezazo. El shock fue total, ni la entrada de Pedri, Dembélé, ni mucho menos Trincao, solucionaron el naufragio barcelonista, pues casi ni inquietaron la meta de Aarón. El Barça queda muy tocado con esta derrota, casi hundido.

domingo, 25 de abril de 2021

Griezmann guía la remontada en Villarreal

 

Se presumía el partido más complicado de los que le restan al FC Barcelona para acabar LaLiga, pero los de Koeman, sufriendo, eso sí, se impusieron en La Cerámica (1-2) a un serio Villarreal, que en ningún momento del duelo dio su brazo a torcer y que metió presión a los azulgranas hasta el último instante, haciendo que estos terminasen pidiendo la hora. El Barça disputó una primera parte de alto nivel, dominando a su rival y dando sensación de poderío. Aún así fueron los locales los que se adelantaron en el electrónico gracias a una meritoria salida de balón de Pau Torres, que culminó Chukwueze con quiebro al portero incluido.




Los culés no se descompusieron con el tanto en contra y respondieron al instante con golazo de Griezmann, que superó a Asenjo con una preciosa y efectiva vaselina. El pase al espacio de Mingueza fue para enmarcar. Un minuto tardó el Barça en borrar la sonrisa de la cara de Emery, y siete más en darle la vuelta al marcador. Foyth cometió un error de juveniles, retrasando el esférico a su guardameta, pero no vio al pillo Griezmann, que como gran jugador de baloncesto que es, fue a robar y a machacar el segundo tanto. Así se llegaría al descanso, con algún intento inane de Gerard Moreno por igualar la contienda.

Tras el paso por el túnel de vestuarios el Barça bajó el pistón, bien por inercia, por cansancio o por demostrar esa malentendida bipolaridad que asoma en más encuentros de los necesarios. Ese once claramente definido que tiene el entrenador a veces se desconecta y luego sobrevienen cuitas y sobresaltos. En esta ocasión Pedri no tuvo el día, el chaval lleva minutos acumulados a cascoporro y con 18 años y debutando en todo un Barcelona, pues pasa que a veces el motor de explosión no genera la fuerza necesaria. Menos mal que De Jong está que se sale y compensa los altibajos del resto.

El submarino amarillo lo intentó hasta los minutos postreros, la tuvo Capoue, pero se topó con la pierna de Ter Stegen. La expulsión de Trigueros por plantillazo criminal sobre la pierna de apoyo de Messi, no hizo que el Barça retomase el control con autoridad. Solo la calidad de sus jugadores hizo que se contemporizase y se contuviesen los intentos de los locales por buscar el empate. El Barcelona, con esta victoria, da un golpe de autoridad en esta liga y presenta sus credenciales al título, esta vez con más firmeza que nunca.

viernes, 23 de abril de 2021

Messi es el azote del Getafe

 

El FC Barcelona obtuvo un meritorio y trabajado triunfo contra el Getafe (5-2). Además de la manita endosada al conjunto de Bordalás también se vislumbró la enésima exhibición de Messi ante los getafenses, con doblete, asistencia y actuación excelsa en general. El resultado, todo hay que decirlo, no fue tan contundente como indica el eléctronico, puesto que los dos últimos tantos del Barça llegaron en las postrimerías de este duelo liguero disputado en el Camp Nou.




Messi avisó en el minuto 3 con zurdazo espectacular al travesaño, e inauguró el marcador con cabalgada hacia la meta de Soria al que batió de disparo cruzado. Lenglet empató, involuntariamente, con gol de rebote en propia meta. Y los azulones devolvieron el favor con tanto en propia puerta de Chakla. El partido, con un Busquets imperial en el medular, llegó al tiempo de descanso con un contundente 3-1, tras gol de Messi, que recogió su tiro al palo para anotar el tercero. Koeman lo entendió como choque sentenciado y se permitió el lujo de quitar a los dos centrales, Piqué y Lenglet, en el minuto 46. Craso error, que luego le pasaría factura al entrenador tulipán con nervios y gritos innecesarios en los instantes finales.

Tras la reanudación el cambio de defensa de tres a dos centrales y la inercia del resultado propició que el equipo azulgrana se relajara en exceso. Un penalti infantil de Araujo sobre Unal, le sirivió al turco para acortar distancias e instaurar el estado de nerviosismo general en el Estadi. Corría el minuto 69 y quedaba mucha tela por cortar. El propio Araujo subsanó en parte su error con un vuelo superlativo para enviar el esférico al fondo de las mallas con un plástico testarazo. Griezmann en el último suspiro anotó de penalti cometido sobre él mismo y que le cedió Messi para que pareciese que había hecho algo en el encuentro. Victoria justa para un Barcelona que, con la Copa en el Museu, busca ahora ganar LaLiga.

domingo, 18 de abril de 2021

El Barça es el puto amo de la Copa

 

Un excelso FC Barcelona borró del mapa a un difuminado Athletic Club, desarbolando por completo a los bilbaínos con un fútbol de salón que le devengó un nuevo título de Copa del Rey, el número 31 en el palmarés del mejor club de la historia. Fue un contundente 4-0, pero bien pudo hacerle un ocho el conjunto de Koeman a su rival, dado el despliegue de fútbol ofensivo total durante los 93 minutos de juego en el que contabilizó 14 disparos a la portería de un Unai Simón que tuvo trabajo a destajo. Todo lo contrario de su homólogo Ter Stegen que no se vio exigido en ningún momento, impecablemente salvaguardado por un imperial Piqué.




Con el consabido 3-5-2, esta vez con Griezmann en el sitio de Dembélé, los azulgranas dominaron de cabo a rabo el duelo. De Jong, Pedri y Busquets la tocaban a sus anchas, Dest penetraba por el extremo derecho con perseverancia, y los leones no daban con la tecla para salir de la guarida, estaban acorralados y no salían de su campo, acogotados por el empuje de los culés. De Jong dio el primer aviso y su disparo se estrelló en el poste. Los posteriores intentos por inaugurar el electrónico tampoco tuvieron éxito y con ese milagroso empate a cero para los rojiblancos se llegó al descanso.

Tras la reanudación Marcelino quitó al capitán Muniaín, el único jugador creativo de los suyos. Toda una declaración de intenciones. De nada le sirvió, como tampoco el triple cambio que introdujo a la hora de juego. El Barcelona había incrementado el acoso, y ya en modo apisonadora arrolló al rival con un juego trenzado y brillante, culminado con cuatro chicharros en doce minutos. Griezmann, tras asistencia del dandy De Jong, inauguró la cuenta. El propio "todocampista" holandés hizo el segundo, de cabeza, tras asistencia de Messi. El rosarino también quería sumarse a la fiesta y protagonizó uno de sus eslalon, arrancado desde su campo para culminarlo con un pase a la red y materializar el 3-0. El cuarto llegó tras la habitual conexión Jordi Alba-Messi, que no por conocida deja de ser imparable.

El Athletic se llevó el segundo revés en quince días, y a partir de ahora ostentará el infausto récord de perder dos finales de Copa en tan escaso periodo de tiempo, la primera ante la Real Sociedad. El Barça, en una temporada que comenzó dubitativo e irregular, se llevó merecidamente este torneo del KO, con eliminatorias solventadas en el último minuto, con remontadas heroicas o en sufridas prórrogas, y culminando su brillante trayectoria con la exhibición ofrecida en el Estadio de La Cartuja que le valió para seguir reinando en esta competición.

domingo, 11 de abril de 2021

El Barça se complica la liga tras perder el clásico

 

Cayó derrotado el FC Barcelona en el campo de entrenamiento del Madrid por 2-1. No les ha sentado nada bien el parón de selecciones a los de Koeman. Si contra el Valladolid en el Camp Nou se sufrió hasta el último minuto para vencer por la mínima, ahora el Barça no carburó como venía haciéndolo antes de la marcha de los jugadores para disputar compromisos internacionales. Los merengues ya ganaban por 2-0 antes de la media hora de juego. Los visitantes no salieron enchufados a la altura de lo que exigía un clásico en el que se estaban disputando algo más que tres puntos. Se pelaba por el liderato, por un título de liga, se jugaban LaVida. Y los azulgranas no dieron el do de pecho, al menos en la primera mitad del choque.




La falta de intensidad y los espacios habilitados para los desmarques de los locales hicieron que estos inaugurasen el electrónico con tanto de tacón de Benzema tras asistencia de Lucas Vázquez en el minuto 14. La fragilidad defensiva de este Barça siempre sale a relucir y se volvió a hacer patente en el segundo gol, cuando una falta lanzada penosamente por Kroos, rebotó en Dest y descolocó a Ter Stegen. Los de Zidane se imponían con claridad merced a las contras que rebatían el fútbol control de los barcelonistas. Estos no dieron muchas señales de vida hasta el descanso, lo único reseñable un disparo de Dembélé que se topó con un atento Courtois.

En el segundo acto el Barça reaccionó bajo una lluvia torrencial. El sacrificado Griezmann entró en el 46 por Dest. El paso de tres a centrales a jugar un 3-4-3 lo notó el equipo, tocaban mejor y transmitían sensación de peligro al rival, todo ello bajo el diluvio madrileño. Messi conectó con Jordi Alba para acortar distancias en el marcador, el lateral la centró con veneno, Griezmann la dejó pasar y Mingueza hizo diana con la espinilla. Los locales se defendieron como gato panza arriba, un ejercicio de supervivencia que les salió bien, a pesar del empuje del eterno rival y de la volea de Ilaix al larguero en el último minuto del encuentro.

El árbitro Gil Manzazo, único colegiado que ha expulsado a Messi en 20 años de barcelonista, estuvo mal en líneas generales, no pitando un penalti por agarrón de Mendy a Braithwaithe, de esos que se pitan si en vez de danés eres de Camas o simplemente del Madrid. Y tampoco anduvo fino en el añadido, prolongando 4 minutos cuando daba para 8 ó 10. Pero la floja actuación del trencilla no exime de la crítica a un Barça gris, que no supo marcar más que un gol a una birriosa defensa conformada por Militao, Nacho y Lucas, rompiendo, así, una meritoria racha de 19 partidos sin perder, y quedando terceros en la tabla a falta de ocho jornadas. Complicado. Muy complicado si nos remitimos a los arbitrajes que recibió el Madrid las últimas ocho jornadas de la Liga pasada.

martes, 6 de abril de 2021

El Barça derrota por la mínima al Valladolid

 

Llegaba el Valladolid al Camp Nou con doce bajas, pero hipermotivado para sacar algo positivo del Estadi. Le recibía un FC Barcelona en su mejor momento de la temporada, venía de jugar su mejor fútbol del año y de endiñar un 1-6 a la Real en Anoeta. Pero que si un parón de selecciones por aquí, que si se da el partido por ganado sin bajar del autobús, que si ya se está a un punto del líder Atlético antes de disputar el duelo contra el Pucela, que si se empieza al trantrán o no se sabe qué… el caso es que el Barça estuvo lejos de su nivel y solo pudo derrotar a los blanquivioletas por 1-0 y en el último minuto.




Comenzaron los visitantes con más pujanza que los azulgranas. Daba la sensación que el que tenía una docena de bajas era el Barça. El primer susto lo dio Kodro con un testarazo que se estampó contra el larguero. Messi no tenía el punto de mira afinado, pero lo intentaba con disparos desde la frontal y de libres directos. Los de Koeman controlaban el esférico, pero sin profundidad y sin poner en aprietos a Masip. Faltaba una marcha más para desarbolar a un combativo Valladolid. Era el partido más flojo desde se implementó el sistema de tres centrales. Aún así en el 44 la tuvo Pedri con un zapatazo que desvió Masip al poste. Con el “cerocerismo” se llegó al descanso.

Tras el paso por vestuarios el Barça puso toda la carne en el asador, con asedio incluido a la meta castellana. Los de Sergio ya no salían de su campo con tanta alegría. Messi lo seguía intentado con tiros lejanos. Koeman agitó el banquillo: Trincao, Braithwaite y Araujo al campo. Paradójicamente los dos delanteros no aportaron en demasía y el central sería decisivo en la jugada del único gol del duelo. Con el Barcelona volcado, pero sin fortuna cara a la meta rival, llegó la expulsión de Óscar Plano por una entrada por detrás a Dembélé. Quedaban diez minutos y diez jugadores, el Barça lo buscó y lo encontró en el 90 cuando un centro de De Jong lo prolongó Araujo y lo empaló Dembélé. Un gol que vale un triunfo, una explosión de júbilo, tres puntos y el colocarse a uno del liderato, a la espera del clásico.