sábado, 22 de diciembre de 2018

La sociedad Messi-Alba descompone al Celta


El FC Barcelona se vio sorprendido en su propio feudo ante el planteamiento inicial de un audaz Celta que salió al Camp Nou disponiendo la línea defensiva casi en el medio del campo. Ese atrevimiento podría haberlo pagado caro con una arrancada explosiva de Dembélé o con un pase de Messi filtrado al espacio, pero no sucedió así. La victoria azulgrana (2-0) se cimentó en un gol del extremo francés y con otro clásico de la conexión Jordi Alba-Messi.


Fue un encuentro disputado, controlado y descontrolado a partes iguales, incluso un correcalles en diversas fases del duelo. Sin demasiadas ocasiones de gol y con pocas acciones con brillo. Inauguró el electrónico Dembélé, tras recoger un rechace a disparo de Leo. El delantero galo ha desbancado a Coutinho a base de goles, ya llega a la decena en esta temporada, su rendimiento va in crescendo de forma inversamente proporcional a la que lo hace el del brasileño. Los vigueses no se descompusieron y siguieron buscando la portería rival de la mano de Maxi Gómez y de Aspas. Sin embargo fue el de siempre, el mejor de la historia, el que dio la puntilla al filo del descanso tras aprovechar un pase de Alba.
Tras la reanudación no cambió el decorado, el Celta no salió desbocado, buscó con pausa y mesura el acortar distancias, pero Cardoso, tras los tres cambios, no daba con la tecla para modificar la dinámica estacionaria. El Barça tampoco marcaba el tercero de la sentencia definitiva y el partido se movió en la indefinición, salvo algún destello de Messi o algún chispazo de Pione, que salió tarde para revolucionar el juego de los celeste. Así el Barcelona se va de vacaciones navideñas con el liderazgo consolidado en base a esa velocidad de crucero que ha adquirido tras cuatro victorias consecutivas.

lunes, 17 de diciembre de 2018

El Barça arrasa al Levante con un Messi colosal


El FC Barcelona dio un golpe de autoridad, de líder, en el Ciutat de Valencia. Le endosó un contundente 5-0 al Levante y eso que el partido no comenzó de la mejor manera, Valverde tuvo que improvisar de inicio tras la lesión de Semedo y quedarse sin lateral derecho. La solución menos mala fue poner línea de tres con Piqué, Lenglet y Vermaelen, más dos carrileros largos como Dembélé y Jordi Alba. Con este panorama el Barça no salía bien desde atrás y los locales acometían la meta de Ter Stegen, incluso Boateng estampó el balón en el larguero. Pero dos errores en sendos pases les condenaron, el primero lo aprovechó Messi para arrastrar a cuatro contrarios, dejar solo a Suárez y asistirle para el primer gol. El segundo fallo lo cogió Busquets y largó una pase a Messi que batió a Oier con la derecha. Era el 0-2 al filo del descanso que ponía tierra de por medio para los catalanes.


Tras la reanudación prosiguió el recital magistral de Leo Messi. En el 47 recibió un pase medido de Alba que convirtió en el tercero. El rosarino no dio concesiones a un Levante que trataba de meterse en el partido. Luego llegó un jugadón de Suárez que inició con un caño al defensor y un centro preciso con el exterior para Arturo Vidal, que este dejó en bandeja para que Messi culminase su hat-trick.
El equipo granota perdió definitivamente los papeles. Cabaco cazó a Dembélé y se fue merecidamente a la calle. Mientras Suárez fallaba más de la cuenta, errando dos mano a mano con el portero. Quien no lo hizo durante todo el partido fue Piqué, que estuvo en plan mariscal los 90 minutos, inclusive se permitió el lujo de robar un balón en su área y salir a la contra, en la medular se la cedió a Messi, este se la devolvió para que Gerard redondease la manita. El Barça se irá al parón navideño como líder gracias a la enésima exhibición del mejor jugador de todos los tiempos.

jueves, 13 de diciembre de 2018

Dembélé llegó a tiempo pero el Barça se durmió


Empate a uno en el Camp Nou en la última jornada de la fase de grupos de la Champions League. El FC Barcelona, que ya no se jugaba nada, y el Tottenham, que se lo jugaba todo, firmaron tablas en el grupo de la muerte. En esta ocasión no se durmió Dembélé, como ya había hecho en entrenamientos anteriores, aquí dejó el mejor gol de la jornada, un tanto de megacrack, pero esta vez los que sestearon fueron sus compañeros azulgranas, que fueron de más a menos, cediendo ese 1-1 final. Que por cierto sirve al Barça para igualar el mejor registro como invicto local en Champions, que hasta ahora tenía en solitario el Bayern de Munich.


Valverde puso en liza a cinco titulares y algún jugador del Barça B y eso le bastó para superar a los ingleses a los que les iba la vida en el envite y salieron con todos los titulares. Este fue el guión en la primera parte, en la cual el díscolo Dembélé hizo el jugadón del partido con un robo y arrancada vertiginosa desde el centro del campo en plan Usain Bolt, para recortar antes de fusilar a su compatriota Lloris. Discurría el minuto 7 y los de Pochettino tuvieron que remar contra corriente hasta el final del choque para clasificarse para octavos.
Un pase que dirimían con el Inter de Milán y que a punto estuvo de malograr Coutinho. El brasileño estuvo más entonado que en encuentros precedentes y estrelló dos disparos contra los palos, que habrían supuesto el 2-0 y la eliminación de los Spurs. Pero el esférico no quiso entrar. Para entonces, al igual que toda la segunda mitad, los visitantes dominaban de cabo a rabo, tras “la pochetina” recibida en el descanso. Cillessen fue el héroe tras la reanudación, deteniendo todas las acometidas del rival, pero Kane no se rindió y en el 84 puso un centro medido para que Lucas Moura consiguiese la igualada y el pase a la siguiente ronda. El Barça mantuvo su invicto y Dembélé, si vuelve a hacer golazos como ese, puede llegar a la hora que le de la gana.

domingo, 9 de diciembre de 2018

Messi sienta cátedra en casa del Espanyol


El RCDE Stadium vivió otra tarde mágica del mejor jugador de la historia. Lionel Messi impartió otra master class en casa del rival metropolitano, siendo determinante en la victoria a domicilio por 0-4 que obtuvo el FC Barcelona. Dos golazos magistrales de lanzamiento de falta, una asistencia y un sinfín de detalles de genio dejó el astro argentino a los que asistieron al campo periquito y a los aficionados que nos deleitamos con su actuación delante del televisor.


El Espanyol empezó bien, tocando y conteniendo, pero se notó que cuando se enfrentan al Barça y quieren jugar la pelota no dan la talla. Ellos en esto derbis se mueven mejor en terrenos pantanosos, repartiendo estopa a diestro y siniestro, y si esta leña no se distribuye… a fútbol lo que es fútbol suele ganar el conjunto azulgrana. Si a esto le unes que al cuarto de hora haces una falta en la frontal con Messi en frente, pues date por jo…robado. Leo la clavó en la mismísima escuadra. Inaugurar el marcador y exhibirse fue todo uno, el rosarino comenzó un recital que maravilló a todos, salvo a los locales. Asistió a Dembélé en el segundo, que no perdonó.
Después protagonizó dos tiros a los palos, el primero dio un pase soberbio a Luis Suárez, que este estrelló en el poste, y en el segundo fue él quien estrelló un cabezazo en el otro palo. Ambos remates pudieron ser la sentencia, pero esta la puso Suárez con un gol sin ángulo que endosó a Diego López por debajo de las piernas. Supuso el 0-3 en el 45 y cerrar el partido.
El segundo acto solo serviría para ver un poco de empuje de los blanquiazules en los primeros compases y un golazo de Messi, marca de la casa. Otro lanzamiento directo con el que volvió a retratar a Diego López, que pensaría que su implante capilar le hizo menos daño que los goles de Leo. No fue el día de los de Rubi, pues el VAR les anuló el tanto del honor por fuera de juego. El Barcelona, después del trabajo bien hecho, refrendó su liderato.

jueves, 6 de diciembre de 2018

El Barça honra a Nuñez con una goleada


Un FC Barcelona plagado de suplentes y con varios jugadores del filial no tuvo dificultades en cerrar la eliminatoria copera frente a una batalladora Cultural Leonesa. Lo hizo, además, con una goleada (4-1) que sirvió para homenajear al recientemente fallecido presidente José Luis Nuñez.


Tras el 0-1 de la ida en tierras castellano-leonesas Valverde dispuso un once con tres del filial y el muchos de los menos habituales en las alineaciones. El Barça comenzó bien, dominando el juego y los espacios, y solo la mala puntería de Munir y demás delanteros impedían inaugurar el marcador. Fue el mismo hispano-marroquí el que afinó un poco más y anotó el primero tras revolverse en el área pequeña y ajustar el tiro a la escuadra. Con todo el primer cuarto de hora de los visitantes fue muy intenso, no dejando estar cómodos a los azulgranas en el Camp Nou. Incluso pudieron adelantarse con un disparo de Mancebo.
Denis Suárez, reivindicándose al máximo, marcó el segundo de disparo desde fuera del área; y Malcom de cabeza sentenciaba la eliminatoria al borde del descanso. Señé ponía el tanto de la honrrilla leonesa, tras bajón y relajación de los locales. Y el propio Denis culminaba su doblete, tras brillante asistencia de Riqui Puig, que acababa de salir al terreno de juego y dejó detalles de jugador de gran clase. La nota negativa fue la lesión postrera de Malcom, que se retiró por un esguince en el tobillo.
El Barça ya está en la siguiente ronda de la Copa del Rey, y a buen seguro al Presi Nuñez le habría gustado esta despedida que le brindaron jugadores y afición en el Estadi.

lunes, 3 de diciembre de 2018

Al renacido Piqué se le da bien el Villarreal


Venció el FC Barcelona al Villarreal por 2-0 en el Camp Nou en una tarde en la que los locales se presentaban ante su afición con el “run-run” de los últimos partidos en el Estadi. Y ese “run-run”, ora que si se escapan puntos en casa, ora que si Dembélé caga fuera del tiesto, ora que si Coutinho desentona, no beneficia en absoluto al conjunto azulgrana. Con todo alguna buena noticia hubo, Gerard Piqué, tras un inicio de campaña dubitativo, volvió a ser el central con mando en plaza, solvente en la zaga, soberbio al cruce, dirigiendo a los suyos desde la salida de balón, y por si fuera poco anotando un gol que valía su peso en oro. Se le da bien “el submarino” al central catalán, ya nos tiene acostumbrados a celebrar diana con un fondo de jugadores amarillos detrás. Hasta se permitió el lujo de desquiciar a su marca, Gerard Moreno, que perdió los papeles de forma pueril y acabó sustituido en el tramo final.


Valverde, que celebraba su partido 400 en un banquillo, dio la confianza a Dembélé y a Arturo Vidal. Ambos se lo agradecieron completando un buen partido. El mediocampista sosteniendo al equipo en la medular y sumándose al ataque en cuanto podía, y el díscolo francés haciendo lo que se espera de él: regateando en el extremo y yéndose en carrera de su par. Así en el minuto 36 colocó un centro medido a la cabeza de Piqué, que esté introdujo en la meta de Sergio Asenjo. Con esa mínima ventaja en el marcador se llegó al descanso, sin nada demasiado destacable, y con poco brillo por parte de ambos contendientes.
Tras la reanudación siguió la displicencia de Coutinho, que escuchó algún pito. Obviamente los de Castellón adelantaron líneas, pero el peligro lo llevó Messi con un chut desde fuera del área, y con un magistral pase filtrado al hueco que aprovechó Aleñá para anotar la sentencia de preciosista vaselina. El Barça recuperó el liderato, tras los empates de Atlético y Sevilla, pero le falta bastante fútbol para convencer.