Aunque, Kylian, ya sabemos fehacientemente que algún día jugarás en el Madrid, porque “es tu sueño”, desde la óptica culé solo nos queda agradecerte ese retraso. Y no solo te debemos agradecer esa demora, también queríamos darte las gracias por ese tocamiento de pelotas que has hecho a los merengues de manera machacona:
1º) Les tocaste la moral, babeando, mientras oteabas las obras del Bernabéu, en la visita del PSG a la capital de España.
2º) Les tocaste las pelotillas cuando hablaste en castellano a una semana vista de tu famosa decisión.
3º) Les volviste a tocar los huevos viniendo a Madrid a pegarte un homenaje culinario a escasos días de renovar con el equipo parisino.
En definitiva se te reconoce desde el bando azulgrana todo esos tocamientos en las partes bajas, pero vamos déjate de milongas con las excusas para seguir en el Paris Saint-Germain, que si Francia tira mucho, que si el club galo es muy grande, que si lo llevas en el corazón, que si hostias en vinagre,… te has quedado por el vil metal. ¡Canta! ¡Deja de vendernos la moto! Que tiran más 120 millones para ti y 30 para tu madre. Aquí en este país, aunque ya queda un tanto en desuso, por la entrada del euro, a eso lo llamamos “pesetero”, avaricioso, interesado, “Figo”,…
Tampoco hay que darle más importancia de la que tiene, que no es otra que: has dejado tirado al Madrid, y eso es de agradecer. Hala majo, que disfrutes la pasta, y que te vaya bien… por lo menos hasta el 2025.
