domingo, 30 de abril de 2017

El Barça golea al Espanyol en Cornellà

El FC Barcelona derrotó al Espanyol en el derbi de la Ciudad Condal, saliendo vivo de la última emboscada periquita. Los blanquiazules se volvieron a dejar la piel y lo que no es la piel en el RCDE Stadium para intentar fastidiar la liga al eterno rival, pero no fue suficiente en esta ocasión. Y eso que su mal entendida intensidad sí que comprometió al conjunto de Luis Enrique, pero un par de fallos garrafales de los locales facilitó y puso en bandeja el triunfo al equipo culé.


Fue Luis Suárez el que desatascó el duelo para los azulgranas, primero aprovechando el error monumental de Jurado, que cedió un balón desde el medio campo hacia su portería que se convirtió en un centro medido al delantero uruguayo. Corría la segunda mitad, y en este periodo también Rakitic la cruzaba ante Diego López para encarrilar la victoria, la cual certificaría Suárez de nuevo en otro error de los de Quique Sánchez, que volvió a dejarle solo ante el portero.

El encuentro no desentonó de los últimos disputados entre estos dos equipos, el Espanyol se mostró intenso y agresivo desde el minuto uno. Mientras el Barça capeaba el temporal y poco a poco iba haciéndose con las riendas del derbi. La primera mitad fue un querer y no poder de los pericos, y una pasividad relativa de los barcelonistas. Eso devengó cero tiros a puerta entre ambos contendientes.

Tras la reanudación y la cantada de Jurado el partido se abrió, el rigor táctico se redujo y Messi y Neymar empezaban a encontrar los espacios. El rosarino se la puso a Rakitic para que este tumbase la resistencia rival. Suárez, que no mojaba desde hacía varias jornadas, volvió a poner en lo más alto a los suyos a falta de tres jornadas para la conclusión del campeonato, si bien el Madrid sigue con un partido menos, y la empresa sigue estando complicada.

miércoles, 26 de abril de 2017

El Barça abusa de un Osasuna de Segunda

El FC Barcelona le hizo un siete a un Osasuna que no ha encontrado su sitio en esta Liga Santander y que solo pudo ver como caían, uno tras otro, los goles en su portería, una muestra más, este 7-1, de que la categoría le ha venido grande. Esta jornada 34 los rojillos han certificado su descenso, con total merecimiento, puesto que si vas al Camp Nou te puede caer un doblete de Messi, pero que te lo hagan también Alcácer y André Gomes, ya no es tan normal. Algo falla. Y más si Mascherano te marca su primer tanto en 319 partidos como azulgrana.


El Estadi celebró con un tifo los 500 goles de Messi con el Barça, y el mejor jugador de la historia les devolvió el cariño con un nuevo doblete en la hora que disputó antes de ser cambiado para recibir la estruendosa ovación de todos los culés del mundo. El megacrack rosarino inauguró el electrónico con una acción que aunó robo de balón, velocidad con la pelota en los pies y picadita al portero rival. Un Sirigu que no se había visto en otra como esta, ha pasado en unos meses de defender la meta del PSG, al Sevilla, y ahora a encajar 7 chicharros en un solo partido en Osasuna. André Gomes metía el segundo y se llegaba al descanso.

La poca tranquilidad que nos da este conjunto de Luis Enrique se acabó cuando a los tres minutos de la reanudación Roberto Torres anotaba de lanzamiento de falta. Menos mal que lo arreglaban los locales con 4 goles en 10 minutos (Gomes, Messi, Alcácer y Mascherano de penalti). Los pamplonicas ya no inquietarían más la meta de Ter Stegen, y se dedicarían a ver como caían lo tantos, uno tras otro. Cerraría la cuenta Alcacer en los minutos postreros de este partido homenaje al más grande. En el que todos se unieron a la fiesta de Leo.

martes, 25 de abril de 2017

Los dos capitanes mostando los valores del Madrid

Explicaba Fabio Capello, madridista reconocido, que cada vez que hay un clásico en el Bernabéu los futbolistas del Madrid tratan de lesionar a Messi. Afirmaba el técnico italiano que "la acción de Ramos es de tarjeta roja clara", y añadía que "es una entrada criminal".


Es una vergüenza que hagan ese tipo de entradas, criminales como dice Capello, y luego se les llene la boca con los valores del madridismo. Y por si fuera poco los muy miserables critican la expulsión de Ramos en el minuto 80, cuando el carnicero de Casemiro tenía que haber visto la segunda amarilla en el 45. 


O mucho antes, el rastrero de Marcelo se tenía que haber ido por su barriobajero codazo a Messi en el minuto 20. Pero esos son los valores del Madrid, los que muestran sus propios capitanes, Ramos y Marcelo. Todo un orgullo para los seguidores merengues.

domingo, 23 de abril de 2017

Messi pone de rodillas al Madrid en el Bernabéu

Lo volvió a hacer. El número uno del mundo, y probablemente de la historia del fútbol, Lionel Messi, destrozó al Madrid en el Bernabéu. Una vez más. Con la diferencia que en esta ocasión fue su gol número 500 con el FC Barcelona y en el último segundo del partido. Un 2-3 que escuece y escocerá un tiempo en la capital. Un gol que pone líder al Barça, que puede valer una liga y que el astro argentino celebró mostrando la camiseta azulgrana al estadio, mostrando la zamarra del que es el mejor pelotero del planeta.


Fue un encuentro histórico y una triunfo memorable. Muchos son los adjetivos grandiosos que podrían definir esta victoria épica del Barça en casa del hasta hoy líder del campeonato. El clásico tuvo emoción a raudales, buen juego a ráfagas mezclado con correcalles, enormes paradas de los dos porteros, expulsiones perdonadas a Casemiro y Marcelo, pero por encima de todo la actuación estelar del un excelso Messi, que quiso poner la rúbrica a su estratosférica actuación, definiendo el duelo con ese gol, marca de la casa, en el descuento, silenciando a toda la afición merengue.

Fueron 90 minutos de ida y vuelta, con reparto de pelota, de ocasiones de gol. Inauguró el marcador Casemiro, aprovechando la pasividad de la defensa catalana en un lanzamiento de falta. No tardó en responder Messi con un jugadón de los suyos, que dejaba en tablas la primera mitad. En el segundo acto el equipo de Luis Enrique tuvo ocasiones de gol más claras, pero Navas, a pesar de encajar tres tantos, fue el mejor de los blancos. Rakitic adelantó al Barça con un zurdazo desde la frontal. Esto y la expulsión de Ramos por su entrada salvaje sobre Leo, aclaraban el panorama para los visitantes, pero, contradicciones del fútbol, los culés jugaron peor en superioridad numérica, y James empató en el 86 tras centro de Marcelo.

Con ese 2-2 la liga se le escapaba al Barça, pero el Madrid quiso hacerle un segundo favor al eterno rival -después de la autoexpulsión de Ramos-, se fue a presionar arriba con uno menos, lo que aprovechó Sergi Roberto para sacarla desde el lateral en eléctrico eslalon por todo el campo, para que el más grande finalizase con ese toque magistral de zurda con rosca en el último suspiro y mostrase su camiseta en todo lo alto en el Bernabéu, la del mítico e idolatrado "10" del FC Barcelona. 

jueves, 20 de abril de 2017

El sueño de la Champions se desvaneció (en Turín)

El FC Barcelona empató a cero con la Juventus en el Camp Nou, quedando eliminado en cuartos de esta Champions League. El 3-0 de la ida dejó muy tocado al Barça, y al propio Luis Enrique, que prácticamente se suicidó en Turín con aquella fatídica línea de tres con Mathieu en la izquierda. Todavía tiene uno sudores fríos cuando recuerda al defensa francés  tratando de parar  por su banda a Cuadrado, Dybala y a veces Alves. Hoy el técnico asturiano volvió a la normalidad, con el once de gala. Pero ya era tarde, los tres tantos de los italianos pesaban como una losa y los reyes del catenaccio no dieron facilidad alguna.


El muro bianconero fue demasiado para un Barça que no fue capaz de hacer ni un solo gol en 180 minutos. Algo debieron hacer mal los culés y mucho debieron hacer bien los líderes de la Serie A italiana. Esta vuelta el conjunto catalán la jugó mejor que la ida, pero ya era tarde, tras el catastrófico partido de la ida. Se sujetó bien a Higuaín y mejor a Dybala, al que Umtiti secó, instalado en la línea de cuatro. Busquets mejoró una circulación de pelota que no existió hace una semana. Pero se volvió a errar en los metros finales, ni Messi, ni Neymar, ni Suárez comprobaron si Buffon tenía manos blandas o no.

El sueño de la Champions se evaporó una vez más, y ya son demasiadas para un equipo que tiene al mejor jugador del mundo, y también a Neymar. Y es que el rey del fútbol, Messi, ha ganado una de las seis últimas "orejonas", un dato que invita a la reflexión, a que muchas cosas no se han hecho bien, sobre todo en los refuerzos de la medular, que han sido un lastre. Toca hacer autocrítica y que la directiva tome decisiones sin que le tiemble el pulso. Esto es el FC Barcelona. ¡Visca el Barça!

martes, 18 de abril de 2017

El Madrid roba a manos llenas ante el Bayern

Los atracos del Madrid en Europa son susceptibles de estudio y debate en las más ilustres facultades de criminología del mundo. Llevan robando desde 1955, a manos llenas, más de 60 años perpetrando robos con total impunidad. Pero nada de hurtos, robos a gran escala, como auténticas mafias, ya son tan escandalosos que se dan por asumidos, tipo Bárcenas, Rato,... oye que al final parece que uno se acostumbra.


Y en liga otro tanto de lo mismo, solo que mucho antes, desde 1928 ya comenzaron con sus tejemanejes. Pero eso es otra historia, hoy eso se la suda al Bayern Munich, que acaba de vivir en sus carnes un nuevo saqueo en el Bernabéu. Con la eliminatoria empatada (3-3) tuvo que ver como el árbitro Viktor Kassai no expulsaba a Casemiro, que se lo ganaba a pulso, entrada tras entrada. El colegiado húngaro miraba para otro lado. Pero cuando Arturo Vidal sacó un balón limpiamente, fue expulsado inmediatamente. Justo cuando el Madrid más sufría dado que el conjunto alemán estaba crecido.

Pero no acabó ahí la tropelía, concedió dos goles más de Cristiano, ya en la prórroga, ¡ambos en fuera de juego! Dos goles ilegales para acabar de hundir al Bayern y poner el pase en bandeja de plata a los rateros merengues. Estaba claro, ya que no había existido ningún chanchullo en el sorteo, el típico tongo que siempre favorece al Madrid, había que ayudarlo de alguna manera, pero siempre de forma que parezca un accidente. ¡Qué vergüenza!¡Estos son los valores y el señorío con que se les llena la boca a los miserables del Madrid!

domingo, 16 de abril de 2017

La Real supera al Barça en juego, pero no tiene a Messi

El FC Barcelona se impuso por 3-2 a la Real Sociedad en el Camp Nou, en un duelo marcado por la lucha por la posesión y el buen fútbol, aquella la ganaron los locales por la mínima y el toque y control cayó del lado de los txuri-urdin. Incluso los tres puntos que se quedan en el Estadi, dejan un sabor agridulce, debido al acoso que sufrió el equipo de Luis Enrique durante los noventa minutos.


La victoria pudo caer de cualquier lado, a nadie hubiese extrañado un triunfo de los vascos, pero hubo, como en tantas otras ocasiones, una salvedad: el factor Messi. Los de San Sebastián no tienen al mejor jugador de la historia en sus filas. Lo tiene el Barça y eso siempre es partir con ventaja. Otro doblete del genio rosarino puso tierra de por medio en el duelo liguero, y el tanto de Alcácer pareció dar tranquilidad, pero dos goles, uno de Umtiti en propia meta, y otro de Xabi Prieto en el 45 dejaban todo abierto para el segundo acto.

Tras la reanudación los blanquiazules dominaron el encuentro, pero no supieron materializar el tercer gol, el que les habría dado un punto, o quién sabe algo más, dada la fragilidad defensiva de la zaga culé. Hay quien pensará que los locales se dosificaban para empresas mayores, Juventus y Madrid son los siguientes compromisos, pero lo cierto es que el Barça olvidó un poco el presente. Haciendo olvidar su mejor versión, sus señas de identidad y fiándolo todo a los dos próximos partidos. Demasiada ruleta rusa para un equipazo que tiene en sus filas a Messi y Neymar.

miércoles, 12 de abril de 2017

Juventus 3 -Barça 0: Otro varapalo en Champions

Otra decepción, esta vez mayúscula la que ofreció el FC Barcelona a sus seguidores y a los amantes del fútbol. De nada sirvió la lección del 4-0 en París en la ronda anterior en Champions, el conjunto catalán volvió a las andadas y tiró por tierra el histórico 6-1 ante el PSG, y al mismo tiempo la ilusión de los culés depositadas en un equipo que parecía encaminado a dar muchas alegrías esta temporada en forma de títulos y que lleva camino de convertirse en un año terrorífico para las vitrinas del Museu.


La Juventus endosó un 3-0 a un Barça desastroso, irreconocible, que cayó con estrépito en Turín. Dybala, con un doblete, y Chiellini con un gol de cabeza en un córner dejan prácticamente cerrada una eliminatoria en la que los azulgranas habían depositado muchas esperanzas tras el remontadón del siglo ante el PSG.

Luis Enrique, al igual que en Málaga, volvió a incidir con Mathieu, pero con el agravante de una línea defensiva de tres en el mismísimo Juventus Stadium. Suicidio total. Cuando vimos a Cuadrado por la banda del francés, a Dybala dejarse caer por la misma zona, y la posibilidad de la subida de Dani Alves, -ahora en el bando contrario-, se nos cayó el alma a los pies. La tragedia era susceptible de producirse de forma inminente. El Barça repetía los errores de La Rosaleda, y añadía otros nuevos: la indolencia y la apatía se adueñaron del equipo.

La ausencia de Busquets, por sanción, agravó el desaguisado. Ni Mascherano, ni Rakitic, ni Gomes en la segunda parte, hicieron olvidar al de Badía. El Barça hacía aguas por todos los lados, la medular no carburaba, el balón se perdía rápidamente por querer sacarlo jugado sin Busi presente. La desconexión con el tridente ofensivo era un hecho palmario, y eso a pesar de que Messi estaba motivado y lo intentaba, pero no tenía apoyos a su alrededor. Neymar estuvo ausente y Luis Suárez muy controlado por las torres blanquinegras. Por si todo este desbarajuste fuese poco, mirabas al banquillo y no había nada, absolutamente nada. Y este panorama desolador de no tener una plantilla de garantías, será el factor que determinará que el Barça acabe esta temporada con una Copa del Rey, con permiso del Alavés.

domingo, 9 de abril de 2017

Tremendo fiasco del Barça en Málaga

El FC Barcelona cayó 2-0 en La Rosaleda, tirando la liga de una manera estrepitosa y poniéndosela en bandeja al Madrid. La gravedad del asunto radicó en que se conocía que el eterno rival había cedido un empate ante el Atleti en el Bernabéu, pero ni por esas los pupilos de Luis Enrique tuvieron las agallas suficientes para ganar y ponerse líderes de una competición, que ahora, a falta de siete jornadas para la conclusión se antoja una quimera. 


Y es que, a tenor de lo visto, el Barça no parece querer ganar esta Liga. Sigue sumando decepción tras decepción, y acumulando ocasiones perdidas, que desesperan al culé más pintado. Para más inri inauguró el marcador para el Málaga un ex del conjunto azulgrana, un resentido que no dejó un euro en caja y celebró el gol como si hubiese ganado algo, un tal Sandro. De desagradecidos está el mundo lleno. Y cerró la debacle Jony en el último minuto, cuando ya el Barça jugaba a la desesperada y con un hombre menos por la expulsión de Neymar.

André Gomes prosiguió dilapidando el poco crédito que le resta, fue indolente, lento y no tuvo presencia. Algo que ya no sorprende en absoluto. Para colmo tuvo la ocasión más clara, solo delante del portero y se durmió en los laureles. Claro que no se puede personalizar la derrota en el portugués porque todos estuvieron a un paupérrimo nivel, impropio de un conjunto que aspira -o aspiraba- a otro triplete. Porque si hablásemos de Mathieu y de Denis Suárez diríamos otro tanto de lo mismo. Entre todos se conjuran para alejar al Barça de su verdadera idiosincrasia y por ende, también del título liguero.

miércoles, 5 de abril de 2017

El Barça de Messi barre al Sevilla en media hora

Salió en tromba el FC Barcelona, poseído, como en los mejores tiempos de Guardiola, con presión arriba y juego eléctrico. Parecía que Messi tenía ganas de jugar, tras dos partidos suspendido -uno con Argentina y otro con el Barça-, y cuando el mejor futbolista del mundo tiene ganas de jugar, ya puedes encomendarte a todos los santos. Pero ni siquiera hacerlo a la Macarena le sirvió al Sevilla FC para llevarse un repaso de padre y muy señor mío del Camp Nou, con un 3-0, que ya lucía en el electrónico a la media hora de juego.


El Barça fue un huracán de la mano de Messi, Suárez y Neymar, bien acompañados esta vez por un estelar Iniesta. Y bastaría con que un par de estos tuvieran el día, pero si lo tienen los cuatro al tiempo lo tienes crudo. Más si eres un equipo en fase de depresión, como el sevillista, que hace poco parece que le iba a pelear el título a Madrid y Barça, y en estos momentos se daría con un canto en los dientes si mantiene la cuarta posición de la tabla.

Por contra el conjunto de Luis Enrique está pletórico, parece que ha coincidido con el anuncio del asturiano de su marcha al final de temporada. El caso es que los azulgranas se soltaron una primera parte para enmarcar, deleitando con el esférico y peleando sin él. Si además de brillar en ataque, cuando pierdes la pelota, están ahí los omnipresentes Busquets, Rakitic y Mascherano, la sensación de agobio es total.

Así los goles caen de maduros. Pudo inaugurar el electrónico un Messi en su mejor versión, pero su rosca se estrelló en la cruceta. Sí lo haría Suárez, de espectacular chilena, tras jugadón de Leo por la derecha. El rosarino sí mojaría, por partida doble, en el minuto 27 y en el 33, para sentenciar al equipo de Sampaoli, que veía desde la banda como sobrepasaban a los suyos en todas las demarcaciones.

El segundo acto fue un mero trámite, donde los locales se dosificaron, mientras que los andaluces trataron de no llevarse un saco para Sevilla. Lucho hizo cambios para los duros compromisos a domicilio que vienen: Málaga, y sobre todo Juventus y Madrid.

lunes, 3 de abril de 2017

El Barça sobrevive a Messi en Granada

También sabe ganar el FC Barcelona sin el mejor jugador del planeta. Lo hizo en Los Cármenes, por 1-4, sin Lionel Messi. Y además con un fútbol bastante digno, a pesar de André Gomes, que salió en el once titular para desesperación de la parroquia culé. Claro que la decena restante de azulgranas sí que dio el do de pecho y materializó un buen partido en Granada.


El Barça se encomendó a Neymar para obtener un triunfo vital de cara a sus aspiraciones ligueras, pero fue Luis Suárez, ante la discreción del brasileño, el que abanderó el triunfo de los de Luis Enrique. El killer uruguayo inauguró el marcador con una bella vaselina al filo del descanso y dio la asistencia a Alcácer en el segundo, cuando los problemas crecían para los catalanes tras el empate de Boga tras la reanudación. No fue un triunfo brillante, pero sí trascendente para no perder de vista al líder de la competición.

En la primera mitad faltó pegada, hubo control y buen ritmo de partido, pero los blaugranas se toparon con el mejor Ochoa de la temporada. El portero mexicano ofreció su mejor versión y detuvo las ofensivas de los puntas del Barça. Y eso que sus defensas hicieron aguas todo el duelo, en especial en los córner, donde estuvieron a punto de convertir a Mathieu en el goleador de la jornada.

Con el 1-2 los andaluces buscaron la igualada o los tres puntos que les sacasen de la zona de descenso, pero si están ahí no es por casualidad, los desajustes defensivos, su desorganización en la medular y su poco acierto en ataque, favorecieron la llegada de la sentencia, el tercero obra de Rakitic, finiquitaba el encuentro. Y todavía faltaba el cuarto, logrado por Neymar a pase de Alcácer, era tanto que le hacía centenario en Can Barça, y el que firmaba una cómoda victoria.