Mañana empieza un nuevo y apasionante Mundial de Fórmula 1. El gran circo arranca en Bahrein con cuatro campeones del mundo y muchos títulos entre todos ellos: Schumacher(7), Alonso(2), Hamilton(1) y Button(1). Además por primera vez habrá tres pilotos hablando castellano en la parrilla: Alonso, De la Rosa y Alguersuari, y una escudería española, Hispania Racing, que si Red Bull puede ser la bomba, los del Hispania pueden ser el petardazo.
Que se recuerde será la primera vez que haya tantos gallos en un mismo gallinero, no sólo en la carrera, sino también dentro de los propios equipos, porque claro, dile tú a Hamilton que el uno lo lleva Button, o a Massa que el líder en Ferrari es Alonso. Habrá, por tanto, multitud de piques entre rivales y entre compañeros, la concordia brillará por su ausencia, y a tenor de esas inexorables luchas internas, el gran beneficiado será el espectáculo.
Y además de todos los pilotos mencionados, habrá que prestar atención a Vettel, que ya irrumpió con fuerza la pasada campaña y tiene un monoplaza muy fiable, y por qué no a Weber que tiene el mismo Red Bull que él. Ocho meses de competición devengarán emoción a raudales, escaramuzas inverosímiles e infinidad de guerrillas, pero sólo una gran batalla final: el título mundial.
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