jueves, 8 de octubre de 2009

LA PARADA NACIONAL

En mi pueblo, cuando hablamos de la parada, lo hacemos con cariño para referirnos a la Felisa, que lleva 22 años engrosando las listas del INEM. En el panorama futbolístico actual, cuando se dice “la parada”, nos estamos refiriendo, cómo no, a la única que se ha hecho en la longeva historia del balompié, la parada de Casillas, cual si no.

Estamos a jueves, y todavía nos estamos desayunando la paradita dichosa. Por favor, no tenemos con qué rellenar periódicos ¿eh? Si es que cuando no juegan el Barça, ni el Madrid, se para el país. Y esta sí es la verdadera y auténtica parada. La parada nacional. Toda España se para -deportivamente hablando- cuando no juegan estos dos colosos del fútbol mundial. No hay con qué rellenar tanto papel de celulosa. Así que hay que poner la paradita de Iker, que si Laporta se va a México de excursión y se hace la foto con Eva Longoria, que si Pellegrini recibe un toque, (tras su “desastroso” arranque liguero, “tan sólo” 15 puntos de 18 posibles), que si Torres tiene una sobrecarga, que si Roberto Carlos se ofrece gratis a su ex equipo, etcétera.

Ahora bien, de entre todas las noticias de relleno que se suceden y las que nos quedan por tragar, siempre hay alguna que merece ser destacada: a Guardiola le han homenajeado en su pueblo natal, Santpedor, nombrándolo hijo predilecto. Ya estaban tardando por cierto. Y él, humilde como de costumbre, les cuestiona ¿qué he hecho yo para merecer esto?. Pues sin ir más lejos, ganar en un año 5 títulos y dejar al Madrid con cero, pero con “la parada de la historia”.
Casi nada, Pep, casi nada.

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