FELIZ “NABIDAL” Y PRÓSPERA COPA NUEVA

Casi media Copa del Rey valió anoche el gol de Abidal en San Mamés, donde tras 180 minutos disputados, no hubo vencedores, (0-0 y 1-1), pero sí un vencido. En una “catedral” venida a menos, susceptible de hacérselo mirar, pues uno de los más grandes estadios del mundo, por belleza implícita y por genuina afición, no puede degradarse con pitadas sin sentido a Iniesta, ni con lanzamientos de objetos a los contrincantes, uno de los cuales impactó a Abidal en plena cabeza. Pero esa indigna afrenta la conculcó “el mago” francés con un zurdazo cruzado, para sentenciar al Athletic y la eliminatoria, tomándose cumplida revancha por el agravio hostil hacia su persona y avanzando a su equipo a los cuartos de final.

Se le volvió a atragantar al Barça el planteamiento de Caparrós, los bilbaínos cerraron líneas en torno a Iraizoz y con la defensa muy junta, hacia difícil el juego combinativo de los azulgranas, que ni con la vuelta del mejor jugador del mundo, eran capaces de superar el muro pertrechado por los leones. Ni Messi, ni tampoco un Villa desacertadísimo, tuvieron su día y se diluyeron en la maraña rival.

Guardiola se dejó en el banquillo a Iniesta, y su equipo se atascó más de la cuenta, eso sí, el dominio y la posesión correspondían a los de siempre. Pero Keita no suplía el ritmo alto de balón que proporciona el de Fuentealbilla, eso sí fue un bastión en la medular tuteando al rocoso centro del campo rojiblanco. Contrarrestaba esto el catedrático Xavi, que manejaba los tempos del choque en su partido 550 con el Barça (récord absoluto) y salió ovacionado por el público de casa. Ahí recuperó su señorío la incondicional grada de San Mamés, que animó a los suyos con un fervor y una pasión, impensables en cualquier otro estadio.

Debutó Afellay, testimonialmente, pues no recordamos que tocase el balón en los tres minutos que disputó; Abi marcó su primer tanto con la zamarra blaugrana; Puyol arriesgó, jugando en el tramo final tras salir de una lesión y Guardiola obtuvo un nuevo éxito en su partido 150 dirigiendo al FC Barcelona. En los cuartos espera el Betis, con otra afición tan pasional o más que la de Bilbao.