El sistema 3-5-2, no es el habitual que usa el Barça, pero ayer tiró de él: 3 puntos más por la victoria, 5 puntos que le saca al segundo y 2 goles que le marcaron al Xerez. Y... poco más, luego de ese sistema, ya pasamos al soporífero sistema ZZZ... que entraba sueño de verlos jugar, vamos. No se sabe si era el estado del terreno de juego, lamentable por cierto, la poca motivación existente, tras los partidazos contra Inter y Madrid, la nula compenetración entre los jugadores menos habituales o la displicencia que exhibieron algunos blaugranas sobre el césped.
El Xerez con más predisposición, pero con muchísimas carencias, no pudo con el líder de la liga, que con un par de destellos de los cracks, solventó el envite casi sin despeinarse. Lo criticable es que lo hizo en el último minuto del alargue, y hasta entonces el pundonor jerezano casi obtuvo el premio del empate. Ningún componente del equipo azulgrana destacó por encima de los demás, todos rayaron a un nivel bajísimo, y solo la espléndida vaselina del mago “Ibracadabra” sirvió para dejar un buen sabor de boca. Poco bagaje para un equipo tricampeón.
No hay comentarios:
Publicar un comentario