Pues últimamente la cosa está cruda para escribir sobre algo, de hecho ayer no se me ocurría nada, y mira que le di vueltas, y hoy tres cuartos de lo mismo, al final me van a echar de la redacción de Mi Mundo Deportivo por vaguitis aguda.
Y es que entre tanto sonarme los mocos y que la agenda deportiva no dio para mucho, no te dan las neuronas para comentar la jugada. Que si Ibra se pone a 100 (bah, esto ya está muy visto); que si la huelga por aumentar los impuestos a los extranjeros (bah, susceptible de demagogia); que si Agassi se chutó (bah, ¿y quién no? Si hasta yo me acabo de meter paracetamol para tumbar a un elefante); que si Robinho viene al Barça, (bah, y si no viene Cesc, y si no Mascherano, si no para de llegar gente), que si ….
En medio de todo esto, comparece el Mallorca en el Camp Nou, pues ojo con la ensaimada bermellona, que no se atragante, que los de Manzano, a la chita callando, ahí se han metido en los puestos altos de la tabla. Y vienen a jugar, sin nada que perder, y con los azulgrana bajo lupa, que si falta gol, que si no hay juego por bandas, que si Messi se viene al centro, que si Iniesta y Xavi no son todavía Iniesta y Xavi y que si Henry sólo tiene la cabeza en Sudáfrica. Pues bien, hoy se espera que todos y cada uno sean ellos mismos. Se espera al gran Barça
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