Francia se sube a las barbas de España

La Roja no pudo pasar del empate en el Calderón ante la otrora poderosa Francia, hoy día venida a menos, pero que trata de recuperar el prestigio perdido de la mano de Deschamps y de una generación de jóvenes futbolistas, comandados por Ribery.

Le sobró medio tiempo a la selección de Del Bosque, si en los primeros 40 minutos dominaron a los bleus, en la reanudación se vieron sobrepasados en todos los aspectos, perdieron el dominio que habían mostrado en los compases iniciales y a pesar de seguir con altos porcentajes de posesión del balón, no tuvieron llegada.

El gol de Ramos puso en ventaja justa a los locales, y Cesc pudo haber firmado la sentencia, pero falló un clamoroso penalti cometido sobre Pedro. Y a partir de ahí, ya nada salió bien, la lesión de Arbeloa, unida a la de Silva, dieron poca opción para modificar planteamientos sobre la marcha. 

El ritmo galo desnudó la medular española, huérfana del gran Busquets, ayer relegado al eje de la zaga, el “todocampista” que brega, dirige y que impone su ley en esa zona. También juega la suerte, en este caso la mala suerte, esa que hace que Juanfran la pierda en el minuto 93, que Ramos rompa el fuera de juego y que habilite a Giroud, para que deje el empate en el duelo, y en la clasificación para el mundial.