El Barça fumiga a unas águilas de vuelo corto

El FC Barcelona derrotó al Benfica en el Estádio da Luz, lo hizo por primera vez en su historia, por 2 a 0, pero con un sabor agridulce, por la grave lesión Puyol, con una luxación en el codo. Los azulgranas cortaron rápidamente las alas a las águilas rojas, y en el minuto 6 ya habían roto el maleficio que decía que el Barça nunca había marcado en ese campo.

Fue Alexis el que inauguró el electrónico, tras magnífica asistencia de Messi, que llegó hasta la línea de fondo y le dio el pase de la muerte al chileno. A raíz del gol, los locales inquietaron la meta de Valdés en un par de ocasiones, pero también los de Vilanova pudieron sentenciar con dos tiros imprecisos de Pedro y Alexis. “El tocopillano” estuvo muy incisivo todo el encuentro.

En la reanudación los blaugranas siguieron mareando literalmente a los lusos, por medio del fútbol control. El triángulo Busquets-Xavi-Cesc brilló en Da Luz. Hasta que en un eslalon, marca de la casa, Leo se fue de todos los contrarios, y asistió a Cesc, para que este batiese a Artur de preciso zurdazo. Era el minuto 55 y el duelo estaba sentenciado.

A partir de ahí el Barça durmió el partido, con circulación alta de balón, y el Benfica ya sólo se dedicó a dar patadas y a ofrecer un recital de marrullerías. Martins y Matic, debieron ser expulsados, pero un nefasto arbitraje del turco Çakir, lo impidió, eso sí, echó a Busquets sin motivo alguno, por algo que solo vio él. Quedaba la peor noticia de la noche, Puyi subió a rematar un córner y cayó sobre su brazo izquierdo, un lance que tornó la alegría en desolación, reflejada en el pesar de Alexis, que en cuclillas se lamentaba al ver a su compañero roto por el dolor. Ya poco importaba que el equipo liderase su grupo de Champions con autoridad y pleno de puntos. Solo restaba alentar al capitán. ¡Ánimo Tarzán!