Todavía no estaba todo visto en entrevistas deportivas. Ayer asistimos al lamentable interrogatorio a Cristiano por parte del periodista J.J. Santos en una cadena privada.
Si el jugador blanco estuvo tímido e inseguro, tres cuartos de lo mismo le pasó al entrevistador, soso, nervioso, falto de dinamismo, se le trababa la lengua,... no sé quién de los dos lo hizo peor, pero me estaba dando la típica vergüenza ajena, de esto que te dan ganas de cambiar de canal porque te sonrojas.
Se quiso vender como la entrevista del siglo y fue lo más patético de los últimos tiempos. Se supone que lo planificaron al detalle y se hizo un estudio en un gabinete de prensa de prestigio, con la pretensión de ahondar en lo humano y lo divino del futbolista portugués. Grandilocuentes e infames preparativos que devengaron cuestiones tales como: ¿rubias o morenas? ¿carne o pescado?¿Raúl o Casillas?... sólo le faltó preguntar: ¿papá o mamá? Todo esto hace que la multitud de licenciados en Ciencias de la Información engrosando las listas del INEM se den de cabezazos contra la pared, viendo espectáculos tan mediocres y pusilánimes.
Ya se conocían episodios execrables de la lumbrera J.J. Santos, como el acoso y derribo al que sometió a Javier Clemente, o el reciente al locutor Andrés Montes, (¿puede haber algo más deplorable que denigrar a un colega?). Me enervan estos obtusos contumaces, demagogos de pacotilla, que pretenden ilustrarnos con su ignorancia supina.
Pero señores, esto no ha hecho más que comenzar, en el capítulo “Pon una entrevista a Cristiano en tu vida” nos quedan unas cuantas por fumarnos y lo que te rondaré morena. ¿Quién da más?¿O menos?¡Qué miedo me dais!
Si el jugador blanco estuvo tímido e inseguro, tres cuartos de lo mismo le pasó al entrevistador, soso, nervioso, falto de dinamismo, se le trababa la lengua,... no sé quién de los dos lo hizo peor, pero me estaba dando la típica vergüenza ajena, de esto que te dan ganas de cambiar de canal porque te sonrojas.
Se quiso vender como la entrevista del siglo y fue lo más patético de los últimos tiempos. Se supone que lo planificaron al detalle y se hizo un estudio en un gabinete de prensa de prestigio, con la pretensión de ahondar en lo humano y lo divino del futbolista portugués. Grandilocuentes e infames preparativos que devengaron cuestiones tales como: ¿rubias o morenas? ¿carne o pescado?¿Raúl o Casillas?... sólo le faltó preguntar: ¿papá o mamá? Todo esto hace que la multitud de licenciados en Ciencias de la Información engrosando las listas del INEM se den de cabezazos contra la pared, viendo espectáculos tan mediocres y pusilánimes.
Ya se conocían episodios execrables de la lumbrera J.J. Santos, como el acoso y derribo al que sometió a Javier Clemente, o el reciente al locutor Andrés Montes, (¿puede haber algo más deplorable que denigrar a un colega?). Me enervan estos obtusos contumaces, demagogos de pacotilla, que pretenden ilustrarnos con su ignorancia supina.
Pero señores, esto no ha hecho más que comenzar, en el capítulo “Pon una entrevista a Cristiano en tu vida” nos quedan unas cuantas por fumarnos y lo que te rondaré morena. ¿Quién da más?¿O menos?¡Qué miedo me dais!
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