Un FC Barcelona inconsistente cedió la victoria al Madrid (85-91) en un clásico marcado
por la inconveniencia de estar situado a dos días del decisivo partido para el
Barça de meterse o no en la Final Four
de Berlín. Aún con todo el conjunto de Xavi Pascual salió concentrado y a por el partido, y solo un último cuarto
desastroso les privó del triunfo. Eso y la brillante actuación de Thompkins,
que le dio por exhibir sus facultades en el Palau
Blaugrana con nada menos que 25 puntos y 26 de valoración, y la no menos
desdeñable del Chacho Rodríguez, que
con un 15-6-6 se fue hasta los 31 de valoración, convirtiéndose en el MVP del duelo.
Los merengues venían de caer
eliminados en la Euroliga (con una dolorosa serie de 3-0 frente al Fenerbahce),
pero no pareció afectarles demasiado, se impusieron al eterno rival y a punto
estuvieron de recuperar el basket-average,
que se quedó en manos de los culés tras su brillante victoria en el Palacio de
los Deportes. El Barça comenzó bien, con la pilas cargadas, anotando con
facilidad y demostrando, a la vez, porqué son la mejor defensa de la Liga
Endesa. Los 31 puntos de valoración de Ante Tomic sirvieron para que los suyos
se destacaran en el primer cuarto, el pívot croata anotaba y reboteaba a sus
anchas. Ello permitió la máxima renta culé (+16) antes del descanso.
El tercer cuarto fue igualado, con
intercambio de canastas, pero donde ya Thompkins empezaba a soltar la muñeca
(anotó 4 de 6 en triples y estuvo muy acertado en tiros de dos). Pero fue en el
último periodo donde los locales tiraron por la borda todo el trabajo de la
media hora anterior. Los de Laso, guiados por Sergio Rodríguez, sentenciaron
con un parcial de 15-28, que dejó a los azulgranas con muchas dudas de cara al
determinante encuentro de Krasnodar el próximo martes. Aunque al menos continuaran una semana más como líderes de la ACB, y con un partido menos, el pendiente ante el Baskonia.
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