Ayer, entre cañas, aceitunas y montaditos, hacíamos apuestas entre los amigos sobre cuántas portadas de los periódicos de hoy traerían algo sobre el fichaje-culebrón de Cesc. Entre un par y tres quedó el envite. Qué sorpresa nos hemos llevado cuando nos hemos desayunado con tan sólo una página para el mediocampista de Arenys, media si me apuran. ¿No da para más el folletín? Parece ser que para bien o para mal, el novelón está llegando a su fin. A ver ahora con qué rellenamos portadas y parloteos.
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Otro asunto que salió a la palestra fue el exceso de kilos de Ibrahimovic, frase ambigua donde las haya, puesto que el sueco le sobran kilos de peso y de nómina. Aquí, unanimidad entre los presentes, se extralimita en la báscula y adolece de profesionalidad. El sanedrín culé de la cuadrilla le sentenció definitiva e irrevocablemente. También se criticó, como es intrínseco en estos afables chascarrillos, el sobrepeso de Messi, pero al rosarino con venial acritud, todo hay que decirlo. Pero sí, también se le vio entradito en carnes a su llegada a Seúl. No perdonan esas playas brasileñas, esas carnes argentinas –nos referimos a las parrilladas ¿eh?- y esas desidias estivales. ¡Quién las pillara!-proclamó uno-. Aquí ya degeneró la tertulia meramente futbolística, para concluir que el orden de los factores no altera el producto, en referencia a que tampoco es mala combinación la playa argentina y las carnes brasileñas, sobre todos los cuartos traseros (risas varias y miradas insoslayables al tendido de las rubias de al lado). De esto a la depravación medió tan sólo una cerveza más, que afortunadamente se quedó en el cañero.
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LA PRENSA DEPORTIVA DE HOY NOS CUENTA:
ResponderEliminar* SPORT. Cesc por 50 kilos. Ibra-Berlusconi, contacto secreto.
* EL M. DEPORTIVO. Pep pide: Cesc + un pivote.
* MARCA. Thiago Silva: “Es un orgullo que me quiera el Madrid”.
* AS. Mourinho: “¿Un título? No. Por lo menos dos”.