Barça 4 - Almería 0: del puro fútbol al fútbol-puro

El FC Barcelona goleó al Almería (4-0) en el Camp Nou en un encuentro para olvidar, donde los locales no jugaron a nada, dejando de lado el fútbol-arte que saboreamos en épocas no tan lejanas, para cambiarlo por el fútbol-puro, porque menudo puro de partido exhibió el Barça ante su afición, sin jugar a nada y dando muestras de displicencia a lo largo y ancho del campo.

Y eso que el conjunto andaluz con línea de seis en la zaga, a veces hasta de siete, hizo un simulacro de juego en el Estadi, que para eso su nuevo entrenador Sergi Barjuán se podría haber esperado a debutar la siguiente jornada, como ya le propusieron. El póquer azulgrana no dice mucho, de hecho al Almería ya le había marcado los mismos goles el Levante, hace tres días en su propio estadio.

La medular inicial ya predisponía al desbarajuste, Rakitic, Xavi y Sergi Roberto no habían jugado juntos nunca, pero las gloriosas rotaciones de Luis Enrique propiciaron el desaguisado. La banalidad existente la primeria media hora la rompió Messi en el 33 con un golazo desde el vértice del área, ajustando el esférico lejos del portero.  

En la reanudación Luis Suárez llevó la tranquilidad a la grada con un zurdazo en parecida posición y golpeo al de Leo. Bartra remataba con picardía un centro de Xavi para anotar el tercero, y en el último minuto el killer uruguayo volvía a marcar tras preciso pase de la muerte de Pedro, hoy sustituto de Neymar.

Los cuatro tantos fueron de bella factura, eso hay que reconocerlo. Nos quedamos con eso, con que son tres puntos más y un partido menos, y con que el Barça y su técnico tenían la cabeza en los difíciles compromisos venideros: Sevilla, PSG, Valencia y PSG de nuevo, y que por ello han reservado efectivos, intensidades y energías.