Baena no es una nena

¡Es una nenaza! Con todas las letras. El tal Baena, famoso por... por nada, en realidad es un sujeto criado en la cantera del FC Barcelona, que ha crecido (negativamente) como perico en el Espanyol, y que ahora, militando en un equipo de toque como el Rayo, es el único de los vallecanos que se dedica a dar patadas, como un trapacero de tres al cuarto. Un esgarramantas de los que ya casi no quedan.

A Messi le soltó una patada en medio campo, sin venir a cuento, a la altura de la rodilla propia de un ser despreciable, pero en el fondo fue una falta más, sancionada con su correspondiente tarjeta amarilla, que a nadie hubiese extrañado que fuese de otro color. Lo verdaderamente deleznable en el comportamiento de este mascasopas amostazado, es que en los prolegómenos del encuentro, retiro la mano cuando Leo le iba a saludar. Y no contento con ello, el cobarde dice en los medios que fue al revés, menos mal que había doscientas cámaras para desenmascarar a esta gallina rastrera. ¡Nenaza!

Dejando esto al margen, el Barça juega hoy, sin solución de continuidad, contra la Real Sociedad, otro equipo de buen trato de balón, con lo cual podría darse el caso de que expropiase el esférico al equipo culé, como ya hizo el Rayo hace tres días, pero bueno el partido es en el Camp Nou y eso es otra historia.

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