lunes, 1 de septiembre de 2025

En Vallecas: un punto y gracias… a Joan García

 

El FC Barcelona no realizó un buen partido en el Estadio de Vallecas, y el empate (1-1) puede considerarse un buen resultado para el conjunto azulgrana. El Rayo Vallecano fue de menos a más y acabó acogotando al Barça, cercando la portería defendida por un majestuoso Joan García, y relegando a un todopoderoso Barcelona a defender ese punto, que peligró hasta el pitido final del colegiado. Los de Flick comenzaron el duelo con ímpetu y buscando la victoria para equiparse a Madrid y Athletic Club, que ya habían conseguido el pleno de 9 puntos, tras disputar sus partidos. La anécdota la protagonizó el VAR, que empezó no funcionando y se iba y se venía, de forma incomprensible. De hecho, en el claro penalti cometido sobre Lamine Yamal, no hubo VAR susceptible de revisar el derribo sobre el canterano culé. El propio Lamine lanzó la pena máxima y adelantó a los suyos en el electrónico. Joan García ya realizó paradas de mérito a los locales en el primer tiempo. Y este concluyó con un disparo a las nubes de un desatinado Dani Olmo, cuando estaba solo delante del portero.




El segundo acto comenzó de forma similar, con un jugadón trenzado de los visitantes, que Dani Olmo tiró fuera. No anda fino el mediapunta barcelonista. El Rayo ya comenzaba a acosar la meta del Barça, y Joan García acumulaba méritos para convertirse en el MVP del partido, el guardameta estuvo soberbio durante todo el encuentro, recordando por primera vez al porterazo de la temporada pasada, sí, aquel que con sus intervenciones apoteósicas evitó el descenso del Espanyol a Segunda División. No pudo hacer ya nada en el tanto de la igualada, cuando el Rayo sacó un córner y Fran Pérez, sorprendentemente, estaba solo, sin marca, en el segundo palo, rematando a bocajarro, tras el garrafal fallo de la defensa del Barcelona.

Flick, que ya había tenido un ataque de entrenador, poniendo de inicio a una pareja de centrales nueva, Eric García y Christensen, que no jugaban juntos desde 2022, trató de revolucionar el choque con cambios ofensivos, entraron Rashford, Fermín y Lewandowski, pero el escenario no varió en absoluto. Los de Íñigo Pérez siguieron mandando, y dominando de la mano de Isi Palazón, y si no hubiese sido por el pedazo de portero que estaba defendiendo la meta azulgrana, el resultado habría sido otro muy distinto. Pero los cancerberos también juegan, y ahora se empieza a entender el porqué del asunto Ter Stegen, y el porqué la inversión más cara del curso es la de Joan García.

domingo, 24 de agosto de 2025

El Barça gana con remontada en el Ciutat de Valencia

 

Volvió el FC Barcelona a la senda de las remontadas con las que nos deleitó, e hizo sufrir a partes iguales, en el final de la temporada pasada. Esta vez el truco final lo realizó en el campo del Levante, un recién ascendido, con pretensiones, que quiso subirse a las barbas del actual campeón de LaLiga, y que casi lo consigue. Al menos dio el susto a la parroquia culé, tras adelantarse con un 2-0 en el marcador, que asombró a propios y extraños. Los pupilos de Flick comenzaron con intensidad y con la incisión propia de dos extremos de relumbrón, como Lamine Yamal y Marcus Rashford, ambos se iban de sus pares y propiciaban peligro por sus respectivos flancos. Pero hete aquí que los azulgranas locales se plantaron delante de Joan García, y con un requiebro de categoría de Iván Romero, que rompió la cintura de Cubarsí, inauguró el electrónico con un gol de gran nivel. El Barça buscó la igualada con dominio y profundidad, pero fallaba en la definición. El error más clamoroso lo firmó Ferrán Torres, que envió el esférico a las nubes cuando disparó a bocajarro solo desde diez metros.




El Levante buscaba el atrincheramiento con el 1-0, aún con más ahínco que lo hacía cuando el duelo estaba en tablas. Lo que no contaban era conque arbitraba Hernández Hernández, un colegiado mediocre, que pitó un mano de Balde como penalti, cuando no era punible, de ninguna de las maneras. Lo grave del asunto, es que este mismo colegiado -de ingratísimo recuerdo para el Real Valladolid- fue el que hace escasos tres meses no sancionó penalti en una mano más clamorosa que esta, de Tchouameni en un clásico, cuando el balón iba a gol directo. En ambas manos le avisó el VAR, pero siendo más flagrante la de Tchouameni, se lavó “las manos”, y en este caso se le vio el plumero, y sancionó el penalti en el minuto 47. Lo transformó “el chulillo” Morales, con aires inequívocos de la cantera madridista, como que había marcado el gol que daba una Champions, y así se llegó al descanso.

Flick repartió “flickina” en el vestuario, y obviamente agitó el avispero, sacando su arsenal ofensivo. Y volviendo al esquema más reconocible que le dio éxitos en la pasada campaña. Pedri, el mejor del partido, soltó un zapatazo desde más allá de la frontal, que se coló por la escuadra, en el minuto 49, allanando así el camino de la remontada. Refrendó la misma, tres minutos después, Ferrán Torres, que ahora no perdonó, y batió al meta Campos, a la salida de un córner. A partir de ahí los visitantes buscaron la victoria, pero el tanto no llegaba, a pesar del dominio culé. Tuvo que ser en las postrimerías del duelo cuando un balón centrado por Lamine, con música, con clase, y con temple, lo rematara de cabeza Elguezabal en propia meta, poniendo el 2-3 y la justicia poética en el marcador.

domingo, 17 de agosto de 2025

El campeón vence con autoridad en Mallorca

El FC Barcelona comenzó su andadura en esta liga 2025-26 con un triunfo en el complicado campo de Son Moix. Fue un contundente 0-3, pero bien podría haber sido una goleada de escándalo, dado que el Mallorca se autoinmoló con dos expulsiones, ciertamente absurdas e innecesarias, y acabó jugando toda la segunda parte con nueve jugadores, contra todo un Barcelona, que, visto lo visto, no quiso hacer sangre y bajó el pistón de manera ostensible. Lo cual molestó ciertamente a su entrenador Hansi Flick, que no dio por bueno el resultado, ni el rendimiento de su equipo, jugando en superioridad. Eso habla bien a las claras de la exigencia del entrenador alemán para con los suyos.




Lamine Yamal, que lucía su nuevo dorsal, el "10", el número de los más grandes, y a esa altura se mantuvo el canterano azulgrana, puesto que tuvo una actuación de diez. Empezó regateando desde el primer minuto y asistió en el 7, para que Rafinha conectase un cabezazo al fondo de las mallas e inaugurarse el marcador. En el 23 llegó el golazo de Ferrán Torres desde fuera del área, precedido de polémica porque Lamine disparó a puerta, y Raíllo despejó con la testa, quedando tendido en el suelo. El árbitro consideró que no era un golpe serio en la cabeza y el golazo de Ferrán subió al marcador. Las expulsiones de Morlanes y de Muriqui mermaron al equipo bermellón antes del descanso.

Tras la ha reanudación el Barça contemporizó, y a pesar de los dos lanzamientos a los palos, no realizó su fútbol brillante de presión y fútbol control. De hecho no parecía que jugase contra nueve. Ni los cambios que introdujo Flick reactivaron al equipo. Tan solo el tesón y las ganas de marcar de Lamine, ponían la pimienta en el duelo. Y al final lo consiguió en el último minuto con su habitual regate en horizontal, desde el extremo derecho y colando el esférico por la escuadra de Leo Román, que, todo hay que decirlo, fue el mejor de los suyos. Y con esos tres puntos el Barça inicia LaLiga como la terminó, liderándola en su estreno.

domingo, 1 de junio de 2025

Luis Enrique lleva la Champions de Xana a París

 

El Paris Saint-Germain consiguió por fin su ansiada “orejona”. Después de 14 años desde que arribó Al-Khelaifi a la presidencia, con todo el poder de los petrodólares de Qatar, y 2.300 millones de euros después, el equipo francés consiguió la primera Champions League de su historia. Lo hizo barriendo de la final al Inter de Milán, un 5-0 vergonzante, que supone la mayor goleada de la competición en una finalísima. El Inter se las prometía muy felices después de haber eliminado al FC Barcelona en la prórroga, en parte por la bisoñez de conjunto azulgrana, pero después de “la manita” francesa… para ese viaje no hacían falta tantas alforjas.




Fue un triunfo coral, de la mano de un entrenador top, como Luis Enrique, que ya come en la misma mesa que Guardiola, Ancelotti, etc,… después de ganar dos Champions con diferentes equipos. El asturiano la ganó con el Barça y ahora con el equipo parisino. El PSG fue infinitamente superior a los neroazurri, a los que se les ha hecho larga la temporada, perdiéndolo todo en el último tramo del curso, Scudetto, Copa de Italia y ahora la Copa de Europa. Mientras, los franceses han ido creciendo de forma exponencial, pasándolas canutas en la liguilla inicial, pero luego barriendo a todos con los que se ha enfrentado en los cruces. Ahí también se han hecho patentes los petrodólares, cuando a principios de enero te traes al crack Kvaratskhelia del Napolés, como quien se compra un pantalón.

Mbappé, que dejó en la estacada al club de su ciudad para irse al Madrid, ha visto como sus compañeros han levantado trofeos, uno tras otro, hasta poner la guinda al pastel conquistando la Champions, mientras que él empezó la temporada de blanco y la ha acabado “en blanco”.

Fue la Champions del entrenador franquicia, Luis Enrique Martínez, culé de pro. Y cómo no, la de su hija fallecida con tan solo 9 años, fue la Champions de Xana, con homenaje de los seguidores del París incluido, con tifo del padre y la hija, clavando una bandera del PSG sobre el césped del Allianz Arena de Munich, lo mismo que hicieron los dos físicamente con la Champions del Barça. Una maravillosa y encomiable alegoría de la victoria.

lunes, 26 de mayo de 2025

Lewandowski le pone la guinda al pastel

 El FC Barcelona puso broche de oro a la Liga recién conquistada. Se impuso por 3-0 en lo que antes se llamaba "La Catedral" y ahora es "la iglesia", dado el prestigio que ha perdido en la última década. San Mamés, otrora un campo señorial, ya empezó su declive cuando se dedicó a pitar a Don Andrés Iniesta, el futbolista español más grande de todos los tiempos, por si fuera poco la última visita se metieron de malas maneras con el Barça, y en este partido tuvieron la poca decencia de abuchear al campeón cuando el Athletic Club le hacía el pasillo. Pero lo más indigno fue cuando el macarra de Yuri empujó por la espalda a Lamine Yamal y a raíz de eso la afición rojiblanca se dedicó a silbar a un chaval de diecisiete años cada vez que tocaba el balón, sin que hubiese hecho absolutamente nada. Qué poca categoría. Deleznable. Y qué falta de respeto absoluto.




En lo meramente deportivo, el Barça fue superior al Athletic y lo goleó (0-3), gracias a la inspiración de Lewandowski que anotó un doblete y dejó escapar un "Pichichi" y una Bota de Oro, que eran prácticamente suyas, por estar lesionado este último mes. El delantero polaco ya había marcado los dos goles antes del cuarto de hora de juego. Se hacía centenario con el primero, de preciosa vaselina, y anotaba el 101 como jugador azulgrana, de un remate de cabeza de esos de saber estar en el sitio adecuado. Como ambos contendientes no se jugaban nada, el partido transcurrió sin altibajos, más pendientes los locales de la retirada de Óscar de Marcos que de jugar al fútbol. Y los de Flick, con el 0-2 a favor, se limitaban a contemporizar y tocar y tocar, sin profundidad excesiva.

Lewandowski tuvo el hat-trick en dos ocasiones muy claras en la segunda parte, una la tiró fuera, estando solo y la otra se la sacó Yuri  en última instancia. Los leones tuvieron la oportunidad de acortar distancias con un mal despeje de Cubarsí, que se estrelló en el larguero. En el último segundo un clarísimo penalti sobre Dani Olmo lo transformó él mismo, para dejar el 0-3 final, y rubricar una liga que el Barça se ha merecido más que nadie. Enhorabona Barça!