España campeona de la Eurocopa, a pesar de la UEFA

 

La Selección Española de Fútbol se proclamó campeona de Europa por cuarta vez en su historia, derrotando en la final a Inglaterra por 2-1. Y lo hizo a pesar del patético cartel de presentación del torneo que realizó la UEFA, exhibiendo a unas selecciones que no han ganado absolutamente nada, como Croacia y Bélgica, en detrimento de una triple campeona como La Roja. Una vergüenza total y absoluta que se ha acabado volviendo contra el máximo organismo europeo del fútbol. Pero los muchachos de De la Fuente se revolvieron contra tamaña aberración y dieron el do de pecho para adjudicarse el torneo con una solvencia que ha sorprendido a propios y extraños, ganando todos y cada uno de los partidos que han disputado.

En la finalísima el combinado nacional dio buena cuenta de los ingleses. Un conjunto el de Gary Neville que ha llegado a este último encuentro sin disputar tan siquiera 15 minutos dignos en toda la competición. Eso sí, sabiendo sufrir y sacando los partidos adelante, aunque fuera a trancas y barrancas. Ni su entrenador ha sabido buscar soluciones, ni tampoco sus estrellas, véase Kane o Bellinghan, han estado a la altura que se espera de ellos. Por lo que fuera y para alegría nuestra “Football’s NOT coming home”. Pero sí que ha vuelto a casa, doce años después ha vuelto a España.

Ningún de los dos equipos arriesgó en los comienzos. España tratando de controlar el esférico, pero sin mucha llegada, y los británicos sin demasiadas ideas, bien pertrechados en el campo y poco más. Los de Southgate no querían jugar y La Roja quería, pero no podía. Lo cual devengaba un notable atasco. Tras el descanso ya no salió Rodri, lesionado. Pintaba mal, sin el mejor jugador de la Eurocopa, pero Nico Willliams nos cambió los miedos por júbilo y algarabía con su golazo de tiro cruzado. Palmer, de precioso zurdazo, parecía que chafaba la fiesta con el empate en el 73, pero faltaba la guinda, la asistencia monumental de Cucurella, para que Oyarzabal firmase la sentencia en el 86. España dejaba en la cuneta a Croacia, Italia, Francia y finalmente a Inglaterra, Y A LA UEFA, y se proclamaba campeona de la Eurocopa, con todos los honores.