La mejor despedida para Guardiola

El FC Barcelona vapuleó al eterno rival metropolitano. 4-0 le endosó a un Espanyol demasiado mediocre, se notó en exceso que esta vez no tenían nada que fastidiar al Barça. El póquer de goles lo firmó el mejor jugador del planeta, Don Lionel Messi, que rindió su particular homenaje a Guardiola en el último partido del técnico de Santpedor en el Camp Nou.

El Estadi se engalanó para decir adiós, o hasta pronto, al mejor entrenador de la historia azulgrana. Y Leo se despidió a su manera del entrenador que le ha llevado a convertirse en el mejor jugador de todos los tiempos, esto es, haciendo goles como churros, uno de falta, magistralmente lanzada, otro con control orientado, ganando en carrera a su par y cruzándola ante el portero. Y otros dos de penalti. Sí, dos de pena máxima. Esas que ahora se le conceden a pares al Barça, pero que cuando la liga estaba por decidirse, le sancionaron a favor 3 en 26 partidos.

Al finalizar el derbi catalán, Pep recibió su merecidos honores, con sus mejores momentos al frente del club de su vida, con banda sonora de Coldplay y Lluís Llach. Cuando le tocó el turno de hablar, nos dejó frases para volver más emotiva la noche: “No sabéis el cariño y la felicidad que me llevo a casa” y “hasta pronto, no me perderéis nunca”.

Se va el mejor, pero queda su legado, su aportación al juego con su fútbol excelso, su catálogo de valores y su respeto por los rivales. Se pone así, punto y seguido a la mejor época del FC Barcelona, que puede acabar con la guinda, si el 25 de mayo, se consigue levantar la Copa del Rey. Muchísimas gracias por todo Pep.