ÉXTASIS EN AZUL Y GRANA

Qué lejos quedó aquel chiste poco gracioso de no hace tantos años, cuando el Barça sólo tenía en sus vitrinas la Copa de Europa de 1992 lograda en el viejo Wembley, que decía: ¿Cuántas Copas de Europa tiene el Barça? Dos, la primera y la última. Hoy, 30 de mayo de 2011, el FC Barcelona ya tiene cuatro, ahí es nada. tres de ellas en los últimos cinco años, dos en los últimos tres. Y todas ellas en color. El mejor equipo del mundo en los últimos tiempos, y posiblemente el mejor equipo de la historia.

Todo el mundo del fútbol se ha rendido a la clase magistral que dieron los de Guardiola en la catedral del fútbol, Wembley, ante todo un Manchester United, empequeñecido por este Barcelona de leyenda. Ayer la Ciudad Condal se echó a la calle para festejar el doblete de su equipo: Liga y Champions. Con la camiseta para la ocasión que rezaba: “Campions” en el pecho y en la espalda un esclarecedor: “El fútbol te devuelve lo que le das”, llegó el equipo al Camp Nou para rematar el fin de fiesta con los seguidores culés.

Sir Alex Fergusson reconocía en la rueda de prensa posterior a la finalísima que jamás nadie les había dado una paliza así. Este laureado y educado entrenador, que una vez más ha demostrado su saber estar en las victorias y en las derrotas, no como otros, que recibiendo el mismo baño, no saben perder y aún siguen preguntándose: ¿por qué?.

Al éxito se llega por camino muy diferentes, pero el que ha elegido este club es maravilloso, una manera fascinante por su estilo de concebir el fútbol, deleitando al planeta entero ante un poderoso United, con siete canteranos en una de las mejores finales de la historia, sin contar con Puyol, que se reservó para ceder la gloria a Abidal en el césped y en el palco, dejándole el brazalete de capitán en una noche mítica, en la que uno de los mejores conjuntos del mundo, el Manchester, cayó derrotado porque jugaba contra el mejor equipo de la historia, el FC Barcelona.