Ni Orenga es un entrenador ni Siro López un comentarista

Llamar al segundo mejor jugador de la historia del baloncesto español "Juan Carlos Calderón" cuando hasta el penúltimo mono se sabe el nombre de "La Bomba" Navarro, dice poquísimo del invento de Mediaset de poner a narrar los partidos al impresentable de Siro López. Solo los que hemos vivido intensamente las retransmisiones de la mano de verdaderos entendidos como Ramón Trecet, Pedro Barthe o el añorado Andrés Montes, sabemos lo que nos ha tocado sufrir con el mencionado sujeto en este Mundial.

Pero esto es lo menos malo que nos ha pasado, pues la selección nacional, la anfitriona, la mejor generación de basket de este país, acaba de caer en cuartos ante Francia por un sonrojarte 65-52. Collet, míster francés, le ha pegado un revolcón a Orenga de los que hacen época, demostrando que la impericia de nuestro seleccionador ha pasado factura, y en el momento en que alguien ha planteado una defensa agresiva y un sobremarcaje al jugador franquicia de nuestro combinado, Pau Gasol, todo se ha ido al garete.

No obstante, sería demasiado injusto cargar todas las culpas sobre Orenga, porque los jugadores decisivos no aparecieron, los NBA y los ex-NBA no dieron la talla, no salió nada, el 2 de 22 en triples ya condenaba por sí solo, pero es que la defensa fue penosa, nadie cerraba el rebote, y los intentos en solitario de Rudy fueron patéticos. En definitiva una noche aciaga, en la que nada, ni tan siquiera el público, estuvo bien, y en la que hubo que descolgar esa medalla que ya algunos nos habían puesto de antemano.

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