¿ES ÖZIL MEJOR QUE MESSI?

Özil, Mesut para los amigos, “Nemo” para los compañeros, está declarado por la caterva cibelesca y el relañato, nuevo segundo mejor jugador del mundo, sacándolo en portada con un ficticio Balón de Oro. Acaba de desbancar a Cristiano, de esa posición, porque sobre el número uno del planeta, hace ya mucho, mucho tiempo, que ya nadie de duda que es Lionel Messi.

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Decimos que la caverna lo nombra segundo, y lo matizamos, porque el chavalín este, todavía tiene mucho que aprender para desbancar a un tal Iniesta y a un tal Xavi, campeones del mundo, de la Eurocopa, y balón de plata y de bronce, respectivamente. Desde los panfletos madridistas, visto que la batalla por desbancar a Messi utilizando a Cristiano, no da más de sí, ya empiezan a aupar al turco-germano de 22 años. De hecho, pásmense, lo comparan con Zidane. No le quedan huevos y leche por tomar para llegarle a la suela del zapato al francés.

En un ataque de ¿humildad?, el propio Özil ha declarado que: “él aún no es Zidane”. ¡Guau!¡Qué modestia la del muchacho! Aún no... En fin, que el chico hizo un buen mundial con Alemania, ha encadenado un par de partidos notables con el Madrid, y claro, estaba tardando la caverna mediática, en iluminarnos con otra patética comparativa con Messi.

Al argentino no se le puede medir con nadie, ¿se imaginan a otro jugador marcando el gol de fantasía que le metió al Arsenal?. Nadie le aguanta el ritmo, se suceden unos tras otros los sonrojados con estas comparativas. Ya quedaron retratados unos cuantos merengues con parangones precedentes. La primera comparación odiosa que tuvo que soportar Messi fue con Robinho, que no le aguantó ni unos meses porque el brasileño hizo una temporada nefasta; luego le toco el turno a Robben, que fue el que mejor perder tuvo, afirmando que “Messi era el mejor del mundo, un extraterrestre”; la temporada pasada le tocó a Cristiano, al que Leo ya había destrozado en la final de Champions en Roma contra el Manchester. Tocado. Y al que acabó de romper la temporada pasada con unos números estratosféricos y una liga, que se decidió a favor del Barça, con un Messi estelar. Hundido.

Todos han sucumbido, uno tras otro, ante el don y la clase que posee Messi, pero en estos últimos días se reabrirá el debate con Özil, alimentando por una prensa interesada en vender periódicos. Surgen declaraciones provenientes de todo el globo (ayer, sin ir más lejos, el ídolo de Zidane, “El Príncipe” Francescoli, afirmaba que “Messi es mejor que Maradona”), diciendo que el azulgrana es el más grande, a una distancia sideral del segundo. Compararle ahora con el alemán, o seguir con el luso, sería más una pugna mediática que real, aparte de absurda, porque entre Messi y esos dos, no hay contraste susceptible de sustentarse. Entre otras cosas, porque Cristiano u Özil, luchan por ser el mejor de la temporada y Messi lucha por ser el mejor de la historia.