Nunca me pierdo un partido del Barça, sin embargo, no suelo ver los partidos de la selección, el sábado, mientras hacía tiempo para salir a tomar unas copas, me senté con una Sagres fresquita en el chaise-longue y me dispuse a ver unos minutos del España-Bélgica, y tengo que reconocer que, sin ser un partidazo, me enganchó. No entendí muy bien el porqué.
Luego mientras iba al encuentro de mis amigos, encendí un cigarrillo y caí en la cuenta, claro, es que la selección española, es el Barça camuflado con una camiseta roja. Efectivamente, enseguida até cabos, dirige Del Bosque, lo de dirige es un eufemismo, porque hace lo mismo que Aragonés, el cual plagió directamente y sin tapujos, el esquema de Rijkaard. Y fui más allá, ya había oído-leído, que tomaban la base del equipo azulgrana, y no exageraban ni un ápice, tomaban la base, la altura, el lado, el ángulo y hasta la hipotenusa si me apuran. Juegan Puyol, Piqué, Xavi, Busquets, falta el crack Iniesta por lesión, Bojan está para ser titular, Valdés puede jugar de sobra, si Casillas es un mero espectador, en el banquillo están Cesc y Reina, y espera que Pedro no llegué al Mundial.
Perdóname querido Barça, te seré “infiel” a ratitos con la selección. Nobleza obliga. ¡Visca La Roja!
ole, ole y ole
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