El Barça le endosa una manita al Murcia en Copa

Cinco goles como cinco soles se llevó el Murcia en su visita al Camp Nou en partido de vuelta de dieciseisavos de Copa del Rey. Un 5-0 que el FC Barcelona le metió con la segunda unidad, puesto que Valverde solo incluyó a Piqué los titulares habituales y no todo el encuentro. Los menos habituales se despacharon a gusto contra los pimentoneros, sobre todo Denis Suárez que dio muestras de su calidad. No todos, porque Deulofeu volvió a marcarse un partido canalla y escuchó algún pito.

A los dieciséis minutos ya ganaba el Barça con gol de Alcácer, no querían sustos de última hora y sentenciaron rápido para evitar sustos. El 3-0 global daba tranquilidad y permitía lucirse a los locales, mientras que los murcianos capeaban el temporal como podían. Con ese solitario tanto se llegó al descanso.

Tras la reanudación el Barcelona subió el ritmo y llegó la lluvia de goles: Piqué, Vidal, Denis y Arnaiz anotaron en la meta defendida por Santo. Deulo buscaba su golito pero no lo encontró. El público se divirtió y vio como al Murcia se le hacía larguísimo el segundo acto. Denis dejó múltiples y variados detalles de calidad, entre ellos su gol y la asistencia de tacón para el tanto de Arnaiz. Y el Barça a la siguiente ronda.

El Barça se sobrepone al Valencia y al arbitraje

Otra vez el FC Barcelona será protagonista del escándalo arbitral de la temporada, si la pasada Hernández Hernández le birló un gol ante el Betis en el cual  la pelota sobrepasó la línea con creces, en esta ocasión fue Iglesias Villanueva el que se comió un clarísimo gol de Messi que también traspasó la raya de gol de Mestalla. Habría significado el 1-0 para los azulgranas y tal como jugó de timorato el Valencia en la primera mitad, probablemente la sentencia.

El conjunto de Valverde fue a por la victoria al estadio del segundo clasificado, a pesar del 4-4-2 planteado por su técnico, en detrimento de un atacante más, dominó al equipo ché, no dejándole pasar del medio campo, y obligándole a cometer muchas imprecisiones a la hora de sacar el balón jugado. A parte del escandaloso gol no concedido al Barça no se recuerdan demasiados apuros del portero Neto. Ni Suárez, ni Paulinho, ni el propio Messi inquietaron demasiado al portero local.

Tras la reanudación el Valencia dejo los miramientos en el vestuario y salió a jugar, era su momento de ponerse a un punto del líder con una victoria. Y asumiendo eso empezaron a llegar con peligro al área de Ter Stergen. Hasta que Rodrigo abrió la lata tras pase de la muerte de Guedes. Quedaba media hora de partido y el Barça se lanzó a la desesperada en busca de la igualada, mientras que los de Marcelino se atrincheraban tratando de defender su ventaja. Fue inútil, en el bando rival jugaba un tal Messi, que relanzó a los suyos, amén de poner un pase magistral a la zurda de Jordi Alba, que la cruzó a la perfección para empatar y mantener las distancias con su más inmediato perseguidor, a pesar del arbitraje.

Ter Stegen y Suárez lideran a un Barça gris

Un flojo FC Barcelona volvió a vencer en partido liguero (0-3). Fue en Butarque, en un campo difícil donde el Leganés lo suele poner difícil, por su tenacidad, organización y en este caso ante el líder por un pésimo estado del césped, más propio de Tercera que de la Liga Santander. Los de Valverde no enamoran con su fútbol, pero siguen siendo eficaces en la resolución de los encuentros. Contra el "Lega" se vivió un nuevo episodio de apagón azulgrana. La medular estuvo demasiado endeble y poco creativa, ni Iniesta ni Rakitic, ni tan siquiera Messi brillaron.

Esa fue quizá la característica diferenciadora de este duelo, que el mejor jugador del mundo tuvo un día aciago, no es que no le saliese nada, es que casi ni lo intentó. Una displicencia que contrastaba con el coraje de los locales, que oponían resistencia y además inquietaban la meta de Ter Stegen. El guardameta germano dio un recital bajo los palos y desbarató las numerosas ocasiones de los madrileños.

Pero esta vez Luis Suárez despertó de su letargo goleador y con un doblete sentenció el duelo. Le ayudó Alcácer que, a la espera de Dembelé, sigue siendo la mejor opción en la delantera, por delante de Deulofeu, Denis, Vidal, o el que sea que quiera ubicar Valverde. El uruguayo aprovechó dos disparos del ex valencianista para remachar a gol el 0-1 y el 0-2. Los de Garitano no se rindieron y a punto estuvieron de acortar distancias, pero se toparon siempre con Ter Stegen. La suerte estaba del lado culé, que incluso supieron aprovechar una asistencia de Messi desde el suelo para anotar el tercero y definitivo obra de Paulinho que enchufa todo lo que toca.

Alcácer se reivindica con un doblete ante el Sevilla

En un partido complicado disputado en el Camp Nou en el cual se mascaba el primer empate del FC Barcelona en casa, el delantero Paco Alcácer se reivindicó ante el Estadi y ante Valverde anotando dos goles como dos soles que valieron tres puntos importantísimos dada la entidad del rival, el Sevilla CF, y teniendo en cuenta de que será el único encuentro que el Barça dispute como local en todo el mes de noviembre.

El conjunto azulgrana salió como un tiro, acosando a los andaluces y llevando peligro constante a la meta defendida por Soria. El asedio local dio sus frutos en el minuto 23 cuando Alcácer aprovechó una cesión errónea de la zaga sevillana para inaugurar el electrónico. Los locales pudieron sentenciar en una primera parte plena de dominio y ocasiones, pero Luis Suárez sigue sin puntería y Messi, en su partido 600 como culé, no encontró el camino del gol ante su rival favorito.

Tras la reanudación el Barça salió a medio gas, pero aún así pudo sentenciar si el colegiado González González hubiese visto dos penaltis clarísimos en el área de los de Berizzo, uno por mano dentro del área y otro por una patada a Rakitic. El Sevilla se creció y logró el empate por medio de Pizarro a la salida de un córner. La alegría solo les duró cinco minutos, los que tardó Rakitic en poner un centro medido desde la derecha para que Alcácer la empujase dentro.

El marcador ya no se movió, con ese 2-1 se llegó al pitido final. El Barcelona respiró hondo con los tres puntos en el zurrón y se sigue mostrando como un líder sólido, manteniendo las distancias con sus perseguidores.

Al Barça añora los goles de Suárez y Neymar en Grecia

Messi no siempre puede sacar las castañas del fuego. Contra Olympiacos, por ejemplo, no pudo. El "cerocerismo" se instauró en El Pireo y muchos extrañaron los goles de Neymar, ya inviables, pero sobre todo de los de Luis Suárez, el que fuera el mejor "9" del mundo en las dos últimas temporadas. El otrora "killer" uruguayo no le marca ni al arco iris, y el FC Barcelona lo acusa en demasía.

Bien es cierto que el equipo heleno es otro en su infierno del Georgios Kariskakis pero no es de recibo que a ese mismo conjunto el Barça le metiera tres goles hace una par de semanas y jugando con 10 toda la segunda mitad por la expulsión de Piqué. La explicación no puede ser otra que los fallos, ya habituales, de Luisito, que sigue sin ver la luz al final del túnel.

El guardameta local, Proto, tuvo ración extra de trabajo y todo lo que le disparaban lo desbarató con solvencia, también estuvo arropado numantinamente por una zaga que no lo dejó vendido en ningún instante del duelo. Por contra su homólogo, Ter Stegen, no tuvo que realizar ninguna intervención reseñable.

El reparto de puntos se celebró como una victoria de prestigio entre la afición griega, mientras que los de Valverde, que buscaron con ahínco el gol en las postrimerías del choque, dieron por bueno el empate tras darse el mismo resultado en el otro partido del grupo entre Sporting de Lisboa y Juventus.