El Barça se estrella contra los palos en Sevilla

El FC Barcelona ha dilapidado la suculenta renta que sacó de dos campos complicados: San Mamés y Calderón, dos victorias que obtuvo por la mínima y con mucho tesón y sacrificio, pero que ha desperdiciado con las dos derrotas, prácticamente consecutivas, frente al Celta y Sevilla. En el campo andaluz ha caído tras realizar un buen partido, mejor que el de su rival, pero la pelota no quiso entrar, cuatro disparos a los postes y la efectividad del portero Sergio Rico evitaron que el Barça se llevase los tres puntos de Nervión.

Emery nunca había ganado al conjunto azulgrana en 20 partidos contra ellos, tuvo que conjugarse un buen partido del Sevilla con un fortuna demasiado adversa de los culés para que se diese su primer triunfo, cimentado en un gran arranque en la reanudación, puesto que en al descanso los visitantes merecieron ir delante en el marcador. Hasta hubo un lance para la posteridad en el que tras una falta lanzada por Neymar el balón dio al palo, rebotó al portero, y volvió a dar en el poste, recorrió toda la línea de gol sin que Piqué se tirase a remacharla, sí lo hizo Suárez, sin ángulo, que volvió a toparse con el otro poste.

Un contraataque, tras pérdida de Busquets en la medular, sirvió para que un pase medido de Gameiro lo empujase a la red Krohn-Dehli. A los cinco minutos, con los de Luis Enrique todavía noqueados, llegaba el 2-0. Iborra peinaba lo justo para que Bravo no llegase a detenerla. A partir de ahí Neymar, que ya había enviado una falta al poste, se echó el equipo a la espalda y desequilibró el duelo en favor de los suyos, regateando, disparando, dando pausa, distribuyendo juego y marcando de penalti, pero no fue suficiente, los locales ya se habían pertrechado atrás con su ventaja y ni otro disparo al palo de Sandro, ni acoso final blaugrana evitaron la derrota.