Debacle roja en Brasil

España comenzó el mundial haciendo el mayor ridículo de la selección en  los últimos 50 años, nada menos que un 5-1 le endosó la Holanda de Van Gaal a La Roja. Este fiasco monumental no lo esperaba ni el más pesimista de la nación.

Los de Del Bosque se adelantaron en el marcador de penalti inexistente marcado por Xabi Alonso, pero un gol de Van Persie antes del descanso dejó noqueados a los Xavi, Casillas y compañía. Y todavía quedaba el recital de cantadas de Iker en la segunda parte.

En la reanudación llegó el varapalo de "la naranja mecánica", Robben y Van Persie destrozaron a la defensa española con sus incursiones. La manita fue cayendo indefectiblemente, pues la actual campeona parecía un conjunto de Segunda B, sin orden, ni concierto, y lo que es peor, desfondada física y psicológicamente. Solo queda ganar a Chile y a Australia, pero incluso con esas dos victorias España se puede quedar fuera.

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