Sin tetas no hay paraíso, sin tiradores tampoco

El FC Barcelona cayó en el Palau ante el Madrid por 69-75, en el segundo partido de la final ACB. La serie queda empatada (1-1) y ahora los blancos tiene el factor cancha. Esta vez la suerte no sonrió a los de Xavi Pascual, y pese a ir arriba en el marcador durante casi todo el encuentro, perdieron las rentas acumuladas en un último cuarto lamentable, en el cual encajaron un parcial de 13 a 26.

El Barça solo tiene un tirador decente, Navarro, y juega tocado por una fascitis plantar, el resto son aleros de LEB. Wallace, Eidson, e Ingles, son posiblemente el peor juego exterior de la última década azulgrana. Y si los juntas a todos ellos en pista en el último y decisivo periodo, puede pasar lo que pasó, que tu rival te pase por encima.

También tiene que darse que el contrario esté acertado, y en este caso sucedió. Fue Sergio Rodríguez, el que en unos minutos de inspiración se cascó 3 triples consecutivos para apuntillar a los azulgranas, en el contundente 3-19 de los minutos postreros. De nada sirvió el dominio culé en los tres primeros actos, ni la exhibición de Lorbek, que con 22 puntos fue el mejor del duelo.

“Sin tetas no hay paraíso” rezaba el título de un serial televisivo, en el Barça tampoco habrá paraíso Endesa, no tiene tiradores, antes se podía agarrar a Basile, a Morris, incluso a Lakovic. Ahora solo queda Juan Carlos, y mermado. Mientras, la artillería del Madrid desarbola a cualquier defensa, “el Chacho” y Llul, tiran desde la posición del uno, o en su defecto aparece el escolta Carrol, y si no, lanzan con tino: Mirotic, Suárez, Velickovic o Syngler. Ellos ponen las tetas y al mismo tiempo preguntan: “¿jugamos al teto?”.