El Barça gana en Málaga dejando una pobre imagen

Este duelo Málaga - FC Barcelona nos sonaba a película que ya habíamos visto, partido a las 4 de la tarde, césped en estado lamentable para perjudicar la elaboración azulgrana, y displicencia barcelonista hasta límites insospechados. Lo único que varió del guión reconocible es que el Barça al final del metraje ganaba el encuentro (1-2). Otra variante introducida fue el tanto madrugador de los de Luis Enrique, no se había cumplido el minuto dos cuando el tridente de circunstancias trenzaba una jugada que salía de las botas del actor principal Messi, continuaba con un pase de la muerte de Suárez y finalizaba con un balón sobre la línea de gol, que Munir solo tenía que empujar al fondo de las mallas.

Ni eso dio tranquilidad al Barça, el conjunto boquerón le comió la tostada durante los 43 minutos restantes del primer acto, el empuje de los andaluces provocaba múltiples fallos en la salida del balón, los visitantes no enlazaban tres pases seguidos, Mascherano no estaba fino y Vermaelen dio un recital de cantadas,  por no hablar de los laterales, horribles tanto Adriano como Vidal, este fue un auténtico coladero por la derecha para el Chory Castro, (Alba y Alves no tienen competencia), a todos les faltó contundencia, y a veces se echó en falta que la rompieran. El Málaga más dispuesto a echar el resto, se volcó sobre la meta de Bravo, tuvieron varias ocasiones, incluido un disparo al poste y ahogaron al Barça con su presión asfixiante. Hasta que, merecidamente, Juanpi marcó tras un falló en cadena de la zaga catalana.

Antes del descanso Messi pudo batir a Kameni, pero Torres la sacó bajo palos, y tras la reanudación tampoco se vio un gran Barça, algo más de control pero sin fútbol elaborado y mucho menos pegada. Todo ello sobrevenido porque los malacitanos no podían estar 90 minutos a semejante ritmo. Así un centro de Adriano lo aprovechó Messi para desequilibrar el partido con un golazo de tijera, que dejó a los de Javi Gracia sin respuesta, y que a la postre sirvió para que el Barça se acostara como líder provisional de la Liga.